La asociación El Defensor del Paciente ha pedido este jueves a la Fiscalía Provincial de Madrid que ordene el "cierre inmediato" de la Residencia de Mayores de Alcorcón tras el informe recibido por familiares de este centro, en el que narran la "horrible experiencia" vivida estas semanas por su gestión de la crisis del coronavirus.

"Sería deseable que se interviniera, ya que son demasiadas muertes, demasiado sufrimiento y demasiada impunidad de la Comunidad de Madrid y ayuntamientos. No queremos que la familias queden sin justicias los ancianos como si no hubieran existido, muertes llenas de indignidad y tristeza, personas que pasaron por y su regalo la posguerra y un final que no desearíamos nadie para nuestros seres queridos. Las familias necesitan justicia, pedimos que se cierren de inmediato cuando haya esta locura de casos", ha pedido a la fiscal la presidenta de esta entidad, Carmen Flores.

Un relato aterrador

La plataforma de amigos y familiares de este geriátrico ha narrado cronológicamente lo ocurrido. Según han explicado, aunque el 6 de marzo se comunicó la restricción de las visitas en los familiares de todos los residentes en la región, en la de Alcorcón se realizó el día 8, pero durante varios días se permitió la salida de residentes válidos y que se permitía la visita de familiares en la entrada del centro.

Tras denunciar al director de que eso no estaba permitido, el 13 de marzo se prohíbe todo tipo de visitas. En ese tiempo, tal y como les informan los empleados, están trabajando sin las EPIs adecuados.

En la misma semana del 16 de marzo, y ante la "imposibilidad" de poder comunicar con sus familiares, algunos familiares solicitaron terminales para videollamadas. "Dicha petición nunca se gestionó, a pesar de que a algunos de nosotros nos dijo que lo gestionaría a través de AMAS y que fuera ésta la que diera el permiso, sabiendo nosotros de antemano que este método ya se estaba utilizando en otras residencias de la Comunidad. Los únicos terminales que llegaron a la residencia fueron donados por trabajadores del Metro de Madrid, que comenzaron a funcionar la semana del 6 de abril", indican en el informe.

A partir del estado de alerta, las TCAE estuvieron sin poder usar las mascarillas a petición del director porque "alarmaban a los residentes", denuncia la plataforma. No fue hasta el 16 o 17 de marzo cuando pudieron usar esas mascarillas, y aún así el día 20 algunos familiares comenzaron a fabricar estos materiales, que fueron entregadas el día 23.

Durante el fin de semana del 20 de marzo comenzaron las noticias sobre los primeros sospechosos con Covid, pero los familiares de esta residencia se quejan de que no se les facilitó información adecuada. "No informan sobre los TEST, solo que se habilita un área en la residencia para los mismos, sin esclarecer la categoría en la que se encontrarán. Por este motivo, confinan a los familiares en cada una de las habitaciones", apuntan.

Fue a partir del 23 de marzo, cuando comenzaron se tenía noticia de los primeros fallecidos. La comunicación es escasa o nula. "No indican el número de afectados, de fallecidos, no cogen el teléfono y solo te indican que te avisarán cada 2 días el trabajador social o la fisioterapeuta, o bien el médico todos los días en el caso que sea un caso grave. Pero la realidad es que los plazos no se cumplen y los familiares son los que tienen que buscarse la vida para obtener información. A partir de aquí y hasta día de hoy, más de los mismo de incapacidad e información hacía las familias", se quejan.

La plataforma también denuncia que ha habido fines de semana sin médico ni responsable y en todo este tiempo hasta el día 10 de abril no se ha permitido derivar a ningún residente al hospital "porque se trataba telefónicamente con la geriatrías del Hospital de Alcorcón". "No se han asegurado de haberse dado paliativos a ningún residente puesto que solo te dicen que se les va a tratar bien", apostillan.

Por otra fecha, hasta ayer no les contaban la realización de test, salvo a algún usuario puntual. Los familiares han destacado también las horas, y días, que algunos familiares fallecidos estuvieron en sus camas hasta que vinieron a recoger los cadáveres. "La residencia no avisa anticipadamente el traslado del cadáver por parte de Bomberos o UME a los familiares y no informan de este tipo de protocolos a ningún familiar", señalan.

Los familiares de esta residencia de Alcorcón también denuncian que les permitieron despedirse de los fallecidos cumpliendo las medidas de protección, como marca la ley. "Se ha corroborado que la Residencia daba salida a los fallecidos sin obtener el Acta de Embolsamiento cuando eran retirados por los servicios funerarios", añaden en el escrito, entre otros problemas.