- La esperanza de vida sigue creciendo y, por lo tanto, cada vez son más las personas que llegan a los 100 años. Pero pocas pueden presumir de hacerlo con la capacidad cognitiva de Carmen López. Basta decir que dos de las principales aficiones de esta urretxuarra siguen siendo ver los concursos de la tele y hacer los crucigramas del periódico. Cumplió 100 años el lunes y celebrará su centenario el sábado, con toda su familia.

López nació en Oñati el 29 de junio de 1920. Su madre era de Santa Cruz de Campezo y su padre del barrio madrileño de Vallecas. Siendo ella niña, la familia se trasladó a Urretxu.

Vivió en la calle Nekolalde y, tras casarse con Francisco Rodríguez, se trasladó a la calle Labeaga. Tiene cuatro hijas, cuatro nietos y tres biznietos. La cuarta biznieta está en camino. Trabajó en la fábrica de zapatillas de Sotero Plazaola y, curiosamente, una de sus nietas está casada con un nieto de Plazaola.

Antes de la llegada del coronavirus, salía todos los días a la calle y disfrutaba tomando un cortado en la cafetería Txindoki de Zumarraga. Desde marzo no ha salido a la calle, para no correr riesgos. Suele pasear en la terraza de casa. Su hija Maite comenta que ha entendido perfectamente los motivos por los que no puede salir de casa. Seguro que pronto podrá volver al Txindoki y le harán un gran recibimiento.

Mientras tanto, se entretiene paseando en la terraza de su casa y viendo la televisión. Solo ve los concursos. "Ve todos los concursos de la televisión y muchas veces responde antes que los propios concursantes. Le solemos decir que esté tranquila, que no le oyen", cuenta su hija.

También le gusta mucho hacer los crucigramas de los periódicos. "La mayoría de las veces, los acaba. Además, curiosamente, le gusta que el periódico no traiga la solución", explica.

A muchas personas el coronavirus les ha fastidiado sus celebraciones, pero no es el caso de esta mujer. El lunes recibió la visita de las autoridades locales y merendó con varias hijas, nietos y biznietos. La gran fiesta tendrá lugar el sábado. Una de sus hijas vive en Valladolid y esa rama de la familia también vendrá a la comida, por supuesto.

Venga, Carmen, ahí va una bien fácil: con seis letras, nombre de una elegante mujer de Urretxu que acaba de cumplir 100 años.

También le gusta ver los concursos de la televisión y muchas veces responde antes que los propios concursantes