- ¡Qué dura es la vida de los esforzados de la ruta! No tenían bastante con jugarse el pellejo entre coches y camiones, que ahora les vienen con un confinamiento y su posterior desescalada.
Primero, todos en casa. El que le pillaron sin rodillo, se volvió loco para conseguir uno. Por no hablar de lo agradable que es pedalear sobre un rodillo: es aburrido, se suda de lo lindo... Menos mal que a ETB y Teledeporte se les ocurrió sacar sus joyas del archivo y los ciclistas pudieron pedalear acompañados por Marino Lejarreta, Abraham Olano, Joseba Beloki, Perico Delgado, Johan Museeuw, Moreno Argentin, Tom Boonen, Lance Armstrong...
El 2 de mayo por fin pudieron salir a la carretera. Eso sí, sin traspasar los límites de su pueblo. La víspera, los grupos de WhatsApp echaban fuego: "¿Hasta dónde podemos ir? ¿Dónde está la frontera con el pueblo de al lado?". Una vez aclaradas las dudas, aprovecharon hasta el último metro de carretera existente en sus pueblos.
El lunes pasado dieron otro paso: podían pasar ya a los pueblos limítrofes. ¡Gracias, mandatarios nuestros! Qué alegría se llevaron los ciclistas de Urretxu y Zumarraga cuando vieron que Legazpi seguía donde lo habían dejado y que los legazpiarras estaban bien...
Pobres ciclistas... Acostumbrados a escalar, qué dura se les está haciendo la desescalada. A las 6.00 todavía es de noche, a las 7.00 aún hace un frío que pela, para las 10.00 hay que estar en casa, no se puede montar un grupito...
Pero bueno, pronto darán un pasito más: los vecinos de los pueblos de menos de 10.000 habitantes (todos los de Urola Garaia) podrán salir a cualquier hora. Además, ya pueden pedalear por toda Gipuzkoa. Ánimo chavales, que poquito a poquito llegaremos a Wuhan y le zurraremos con el inflador al murciélago, al pangolín y a todo el que haga falta.
