- Tras un parón de tres meses, Jantziaren Zentroa reabre hoy sus puertas en su horario habitual para presentar una nueva propuesta cultural. Además, debido al COVID-19 se ha adoptado un protocolo de seguridad.

En este sentido, el edificio reduce al 50% su aforo para poder así mantener la distancia de seguridad de dos metros entre los visitantes, medida que supone un máximo de quince personas en la planta baja y de 20 en la primera y segunda. En la entrada habrá gel hidroalcohólico para todas las visitas, una distancia de seguridad con el mostrador de venta de entradas y mayor limpieza en el edificio.

Para visitar la exposición gratuita de la planta 0 y la permanente en las plantas superiores, no será necesario pedir cita previa, sí en cambio para visitas guiadas, cuyo aforo se reduce a un máximo de 20 personas, y todas ellas deben llevar mascarilla. Para reservar visita guiada se puede llamar a la oficina de turismo de Oarsoaldea al teléfono 943 494 521 o escribir al email jantziarenzentroa@errenteria.eus.

La nueva exposición de la planta 0 se titula Origen y se trata de una original propuesta de la Fundación Social Emaús. De hecho, es el resultado de un ejercicio de reinterpretación de trajes regionales o característicos de personas de otros lugares. En total se exponen 18 trajes que reinterpretan la idea del traje tradicional de diversos países africanos y europeos que se podrán ver hasta el 5 de julio.

Tres son los ejes en los que se ha basado cada creador para diseñar su propuesta: diversidad, reutilización y reinterpretación. Tras escuchar la descripción de su traje regional a diferentes migrantes, los diseñadores trataron de recrear la imagen obtenida utilizando para ello telas y material de segunda mano.

Los creadores son alumnos de AEG Ikastetxea de Donostia y las asociaciones que han participado son Emigrados sin fronteras, Asociación Ucrania-Euskadi, Guardabarranco Grupo de Baile y Mexkadi Etxea asociación cultural.

Además, a la entrada se ubican tres trajes creados en Errenteria, en otoño de 2019, dentro del proyecto Nongoa naiz? Del Mundo. Son el resultado de tres meses en los que diez mujeres realizaron un intercambio cultural cuyo núcleo era la costura. Los trajes expuestos son árabe, ucraniano y de baserritarra.