DONOSTIA - Las labores de desinfección de las residencias de ancianos y de otros recursos sociosanitarios de Gipuzkoa a raíz de la covid-19 conllevaron el año pasado un aumento del 20,9 % en las actuaciones de los bomberos forales, hasta las 3.782 intervenciones en 3.305 siniestros diferentes, 654 más que en 2019.

Según informa la Diputación en una nota, la diputada de Gobernanza, Eider Mendoza, ha dado a conocer estos datos en una rueda de prensa para hacer balance de las acciones de los bomberos forales durante 2020, en la que ha estado acompañada por el director foral de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento, Josu Idigoras.

Tras recordar que en el pasado ejercicio, los bomberos llevaron a cabo un total de 685 desinfecciones motivadas por la pandemia, Mendoza ha explicado que en este período de tiempo el servicio foral también intervino en 667 incendios (20,18 %), 991 salvamentos (29,98 %), 1.436 asistencias técnicas (43,45 %), así como en 211 falsas alarmas (6,38 %).

En función de estos datos, la diputada ha destacado "la importancia de los servicios de emergencia", como "ha dejado claro" la pandemia, ya que "han estado en primera línea en el trabajo contra el virus, tanto en las residencias como en otros recursos forales, y han sido fundamentales en la respuesta" de la Diputación a la covid-19.

La responsable foral ha explicado que, aunque "en las catorce semanas posteriores a la entrada en vigor del estado de alarma los servicios habituales que prestan los bomberos disminuyeron considerablemente", este descenso fue compensado después por "las nuevas necesidades generadas por la pandemia", que motivaron un crecimiento del 64 % de los servicios, respecto al mismo período de 2019.

Por su parte, Josu Idigoras ha desvelado que los 667 incendios (-0,45 %) atendidos por los bomberos el año pasado provocaron 880 salidas de los parques (-7,85 %), de las que 365 fueron a viviendas de entornos urbanos; 60 a inmuebles de uso rural; 82 a industrias y almacenes; 98 a zonas con vegetación; 79 para atender a medios de transporte, y 195 a incendios aislados, que no se extendieron, en contenedores y mobiliario urbano.

Idigoras ha constatado que, respecto al año anterior, las cifras son "muy similares", con las variaciones más significativas circunscritas al número de intervenciones en industrias y almacenes (-35 %) y al número de incendios en medios de transporte (-24 %).

"En ambos casos, los descensos están directamente relacionados con la pandemia", aunque en el de la industria "el descenso de incendios en las empresas es una tendencia de los últimos años", ha aclarado.

Ha develado también que, por horarios, la mayor parte de los incendios se produjeron en horas diurnas (68,52 %), con el sábado como el día en el que se concentran más sucesos de este tipo (18 %).

En cuanto a los salvamentos, ha recordado que en 2020 tuvieron lugar 1.054, una cifra "ligeramente inferior" a la del año anterior (-4,4 %), con un descenso de los relacionados con el tráfico hasta los 338 (-32,53 %), motivado por "las limitaciones en la movilidad" a causa de la pandemia.

No obstante, ha indicado que las salidas de rescate y para prestar ayuda a las personas en situación de riesgo aumentaron un 17,56 %, con 98 servicios más que en 2019, que podrían deberse a que, también por el coronavirus, "ha habido más personas en casa", ha dicho el director foral.

Respecto a las asistencias técnicas, ha comentado que los bomberos llevaron a cabo el pasado ejercicio 1.502 actuaciones en 1.436 siniestros, 816 más que en 2019.

Idigoras ha revelado también que en los incendios atendidos por los bomberos forales en 2020 fallecieron cuatro personas, 33 resultaron heridas y 13 intoxicadas, mientras que otras 14 fueron evacuadas.

En los salvamentos, fueron atendidos 535 heridos, mientras que 340 personas fueron desalojadas de sus domicilios, vehículos o rescatadas de situaciones de riesgo.

Unos datos que, en opinión de Eider Mendoza, dejan "clara" la importancia de este servicio, que recientemente la Diputación ha decidido dotar con dos nuevos vehículos autoescalera giratoria automática, presupuestados en 1,6 millones de euros.