- Todos los grupos políticos del Ayuntamiento votaron ayer por unanimidad a favor de los cambios fiscales para bonificar la tasa de terrazas a los bares con motivo de las restricciones padecidas por el covid a lo largo de 2020. Estas reducciones supondrán 2,5 millones menos de ingresos.

Las bonificaciones, que empezaron a tramitarse el pasado año, incluyeron ayer una última propuesta de EH Bildu que implica que para la segunda mitad del año las terrazas de hostelería de hasta diez mesas tengan un 90% de rebaja sobre la tasa habitual, mientras que las de más de diez mesas, tengan un 33%. Este cambio, así como los iniciados en septiembre pasado, quedaron definitivamente aprobados ayer.

El concejal de EH Bildu Zigor Etxeburua manifestó su satisfacción por el acuerdo general y criticó la “improvisación del Gobierno municipal” para aplicar medidas para compensar a los sectores más perjudicados por la pandemia. “No puede ser que a cada decisión restrictiva del LABI no le acompañe una memoria económica encaminada a compensar a los sectores afectados”, dijo.

El responsable de Hacienda, Jaime Domínguez-Macaya, por su parte, recordó que las bonificaciones se unen a otras ya aplicadas y dijo que el Ayuntamiento no puede dar luz verde a una “exención” total de estos tributos municipales, ya que las tasas se encuadran dentro de decretos forales que no contemplan esta opción. Asimismo, se felicitó por aplicar estas medidas “cuando el Ayuntamiento tienen que hacer frente a una caída de los ingresos” también por la pandemia y un aumento de los gastos. En concreto, cifró en 2,5 millones de euros el descenso de ingresos por el comercio y la hostelería con las bonificaciones por el covid. El descenso en la recaudación por estas rebajas de tasas será de un 35% y, si se contabilizan solo las de la hostelería, de un 59%.

Por su parte, la portavoz socialista Marisol Garmendia alabó las medidas y recordó que se unen a los dos planes de fomento de empleo puestos en marcha el pasado año, que suman seis millones de euros.

Suciedad en Larratxo. El Gobierno municipal rechazó la moción defendida por el concejal Zigor Etxeburua, de EH Bildu, que reclamaba una mayor limpieza en Larratxo y aseguraba que está peor que otras zonas de la ciudad. La concejala de Vías Públicas, Marisol Garmendia (PSE), negó las acusaciones y admitió que en determinadas zonas del barrio existe un problema de excrementos de perros, pero no por falta de limpieza municipal sino por falta de recogida por parte de sus dueños.

Ambulatorio de Intxaurrondo. El Ejecutivo rechazó la enmienda de Elkarrekin Donostia para exigir al Gobierno Vasco que deje el mismo personal en el ambulatorio de Intxaurrondo, ya que uno de los dos pediatras ha sido trasladado a Aiete. El portavoz del PNV, Jon Insausti, señaló que el barrio sigue cumpliendo el ratio de 900 niños y niñas por pediatra y anunció que en la OSI Donostialdea se van a incorporar tres médicos y once enfermeras próximamente.

Carrusel de la plaza de Zuberoa. La petición de los dueños del carrusel de la plaza de Zuberoa para que se les compense por las pérdidas derivadas de la instalación temporal de otras atracciones infantiles en la cercana plaza de Catalunya, que fue defendida por el PP, no concitó el apoyo de la mayoría plenaria. El portavoz del PP, Borja Corominas, pidió que el Ayuntamiento “asuma como propio el perjuicio económico del concesionario derivado de las decisiones unilaterales del propio equipo de gobierno”. Insausti, por su parte, respondió que los feriantes, que no han podido trabajar en Semana Grande, también deben ser tenidos en cuenta y recordó que el carrusel de La Concha también tuvo competencia con la noria, cuando se instaló cerca.

Locales de Amara. Un grupo de representantes de asociaciones del barrio de Amara acudieron al Pleno para reclamar que se les reubique en locales en el mismo barrio, tras ser cerrados los que estaban en unos edificios en mal estado, que han sido desalojados. La moción de EH Bildu defendió que se busque una alternativa para ellos, pero no fue aprobada por el Gobierno municipal porque la petición, según la concejala de Urbanismo, Nekane Arzallus, ya se está llevando a cabo. “No es fácil pero estamos trabajando para conseguirlo”, dijo.

El concejal de Hacienda dice que no se puede perdonar del todo una tasa por las normativas forales que las regulan

Las terrazas de hasta diez mesas tendrán una bonificación del 90% en el segundo semestre de 2020 y las demás, del 33%