-Una docena de artesanos procedentes de la Rioja, con productos alimentarios y de otros tipos, animaron el domingo el Boulevard donostiarra en una tradicional cita que esta vez estuvo a punto de suspenderse por el coronavirus.

Finalmente, los artesanos riojanos instalaron sus puestos y permanecieron en ellos desde las 11.00 hasta las 20.00 horas, invitados, como es habitual, por la Casa de la Rioja.

Numeroso público se acercó a degustar y comprar vino, chorizo, conservas y dulces de La Rioja. Hubo colas en el puesto de rosquillas. Además, también se vendieron artículos de lana y piel. La Casa de la Rioja mostró su agradecimiento al Ayuntamiento de Donostia y a las medidas de seguridad adoptadas por los propios artesanos, que permitieron que la cita pudiese celebrarse, como todos los años tras el Zinemaldia.