- El hotel María Cristina, que ha servido como centro hospitalario para enfermos leves de coronavirus desde principios de abril, cerrará sus puertas a esta función el próximo viernes 15 de mayo, según avanzó ayer el alcalde, Eneko Goia, en la comparecencia que protagonizó en la comisión de Pleno de Servicios a las Personas celebrada de modo telemático tras dos meses sin este tipo de reuniones en la Corporación donostiarra.

El mandatario del PNV señaló que en las habitaciones del centro hotelero de propiedad municipal, aunque gestionado por una empresa internacional, quedan muy pocas personas afectadas por el virus. El edificio, que puso a disposición de Osakidetza 120 habitaciones, ha mantenido una ocupación de enfermos muy baja, fundamentalmente de personas que, por las características de sus domicilios, tenían malas condiciones para cumplir con el necesario aislamiento del resto de la familia.

El cierre del María Cristina como espacio hospitalario es un paso hacia la normalidad, dijo Goia, que compareció a petición del Gobierno municipal para explicar las gestiones llevadas a cabo durante la pandemia.

Tanto el primer edil como otros responsables de distintas áreas comparecieron a petición de los grupos de oposición para explicar detalles sobre el anormal trabajo municipal durante las semanas de confinamiento hasta el momento. Tanto EH Bildu como Elkarrekin Donostia fueron especialmente críticos con algunos aspectos de la gestión del gobierno municipal, especialmente, con la situación de los centros residenciales y el reparto de equipos de protección a los trabajadores de residencias propiedad de Donostia, de los de los pisos tulelados para personas mayores y otros servicios municipales. Al hilo de la situación, la concejala de Acción Social, Aitziber San Román, defendió que las trabajadores del Servicio de Asistencia Domiciliaria han cumplido con el protocolo de protección establecido, aunque admitió que hubo momentos en los que no había las deseables mascarillas ni para estos profesionales ni para otros.

Por otra parte, el alcalde consideró que la situación de Donostia respecto a la pandemia es "muy buena" aunque añadió que quiere "evitar la euforia y que la gente pierda la tensión" necesaria para seguir atajando el mal. "Los números dicen que no está habiendo positivos por PCR", dijo el regidor.

Asimismo, rechazó la acusación de la portavoz de EH Bildu, Reyes Carrere, que dijo que el Gobierno municipal "estaba muy cómodo" tomando decisiones sin consensuar con la oposición. "Le aseguro que no he estado nada cómodo", le respondió Goia, que recordó que al Ayuntamiento le ha tocado no solo tomar decisiones sino, también hacer cumplir las llegadas de otras instancias. "Recuerdo que el mando de la Guardia Municipal es aún hoy del ministerio del Interior", dijo.

En su balance de actividad en el tiempo de pandemia hasta el momento, Goia recalcó que el Plan de Reactivación Económica (PREK), con sus ayudas, es solo una primera parte de las que tendrán que llegar.

El concejal de Impulso Económico, el socialista Enrique Ramos, por su parte, informó de que hasta el pasado viernes, Fomento de San Sebastián había atendido 30.000 consultas sobre las ayudas disponibles y se habían tramitado 1.555. De ellas, el 60% se destinan a los sectores del comercio y la hostelería y el 40% restante, a servicios a la comunidad y las personas, sobre todo peluquerías, según concretó. Por contra solo un centenar de comercios se han mostrado interesados en lo bonos de consumo, que el Consistorio financiará en un 30%. "Creo que han estado ocupados en preparase para la reapertura pero vamos a dar más difusión a la idea", anunció.

"La situación de Donostia respecto al virus es muy buena pero hay que alejar la euforia"

Alcalde de Donostia