- El hostelero Joaquín Fernández, dueño del bar Dickens de la calle Ijentea de Donostia, que obtuvo el campeonato del mundo de coctelería en Japón en 2010, falleció el pasado lunes en su hogar a consecuencia de un infarto a los 72 años de edad. Fernández, que había nacido en un pequeño pueblo de León, vino con su familia a Donostia y a los nueve años ya empezó a trabajar. La cafetería de estilo americano California, donde se servían tortitas con nata, batidos y combinados, fue la primera escuela de hostelería de un inquieto profesional, que llevó el oficio de barman por el planeta y no cesó de inventar cócteles. Su última idea quedó truncada de modo inesperado.

El especial cuidado que ponía a en sus combinados, retirando incluso el cloro al agua del hielo, hizo famosos sus gintonics, que también recibieron un premio internacional hace 20 años. Su establecimiento fue un punto de cita de la noche donostiarra, de los asistentes a eventos culturales y de muchos veraneantes.