El Entierro de la Sardina puso ayer un punto y seguido al Carnaval donostiarra que, aunque quedó finalizado en su programa del centro de la ciudad, se repetirá el próximo fin de semana en Trintxerpe (Pasaia). Algunas comparsas, además, saldrán por Intxaurrondo, El Antiguo, Riberas de Loiola y Amara el sábado. El domingo, Altza celebrará su desfile y el siguiente sábado, 7 de marzo, lo hará Bidebieta.

Los amantes de la fiesta del disfraz se divirtieron ayer con disfraces de viudos y viudas, diablos, curas, monjas y otros personajes más bien oscuros mientras acompañaban por las calles peatonales a la Sardina, camino de su desaparición. La comitiva partió a las 19.30 horas de la plaza de Bilbao y recorrió las calles Getaria, Txurruka, plaza Gipuzkoa, Elkano, Boulevard y Alderdi Eder. Junto al Ayuntamiento, el Dios Momo, Rubén Rodríguez, prendió fuego al pescado y puso fin así a los cinco días centrales de la fiesta.

En la comitiva que recorrió el centro donostiarra tomaron parte Dance Factory y la txaranga Los Pasai, que dieron animación a un desfile con mucho humor, en el que se escucharon los gritos y llantos de quienes se resistían a olvidar, aunque solo por unos días, el Carnaval.