donostia - Los adjudicatarios de los 146 pisos de VPO que construirá Etxebide (Gobierno Vasco) en Txomin Enea - en lo que será la última de las promociones públicas en derecho de superficie (venta) antes de ser todas de alquiler- han hecho público estos días su descontento por el hecho de que la obra aún no haya comenzado, a pesar de que el Ayuntamiento otorgó la licencia de construcción hace un año y el pasado verano se eligieron por sorteo los adjudicatarios.

Según ha podido saber este periódico, la existencia de un colector de aguas residuales de la Mancomunidad del Añarbe que da servicio a toda la zona de Martutene y que pasa casi pegado a lo que tiene que ser la excavación para el edificio, ha hecho que la construcción, adjudicada a la empresa Iza, aún no haya podido comenzar. Ello ha implicado el nerviosismo y enfado de los titulares, que deben seguir pagando alquileres, además de carecer de información concreta sobre el futuro de sus viviendas.

La situación ha llevado a que hayan renunciado "la mitad de los agraciados y a este paso renunciará todo el mundo", asegura uno de los futuros propietarios, Salvador Albarca, que se queja de que los pisos se entregarán entre cinco y seis años después de las inscripciones, un periodo en el que "a la mayoría les habrá cambiado la vida".

"La falta de información por parte de la promotora y de Etxebide-Gobierno Vasco está siendo ofensivo", señala este portavoz, que explica que muchos titulares "llaman y escriben incansablemente a la promotora, pero se limita a decirnos que hasta que no puedan dar comienzo las obras, no nos va a pedir el primer pago". "Entre el Ayuntamiento e Iza se pasan la pelota y el Gobierno Vasco mira para otro lado", añade el futuro vecino, que lamenta que nadie les cita para firmar la compraventa ni hay movimientos en la parcela.

Fuentes de Aguas del Añarbe, por su parte, explican que en octubre de 2018 solicitaron tanto a la empresa adjudicataria como al Gobierno Vasco que garantizase que la construcción del edificio de viviendas no iba a afectar al importante colector que atraviesa el subsuelo del barrio, en cuya urbanización trabaja aún la empresa Amenabar.

Tras solicitar y recibir el proyecto constructivo del edificio de la empresa Iza, Aguas del Añarbe vio que no se hacía referencia a la información reclamada, sino a otras cuestiones, y pidió un nuevo informe técnico, que fue entregado el 31 de enero y se está analizando en la actualidad. Una vez estudiado, Aguas del Añarbe indicará si considera garantizada la seguridad del colector o, si por el contrario, cree que son necesarias actuaciones constructivas para permitir que siga en funcionamiento y dar servicio correctamente también al nuevo barrio. Todo ello indica que la obra puede aún tardar en empezar, como temen algunos.

Por otra parte, hay quien considera que el sorteo entre los adjudicatarios se celebró con una antelación excesiva, teniendo en cuenta la tramitación y estudios técnicos que aún faltaban por hacer.

Asimismo, fuentes municipales confiaron ayer que los obstáculos con los que se ha encontrado esta actuación terminarán próximamente y la obra pueda arrancar en este primavera, aunque quedará después un máximo de tres años para que esté terminada.