A. Zabaleta

donostia - Altza contará con un nuevo aparcamiento de 50 plazas que, además, estará dotado de un sistema de drenaje sostenible. Se trata de una nueva forma de construir que tiene en cuenta criterios medioambientales y que se probará por primera vez en Donostia. En realidad, ya se hizo una prueba en una pequeña zona de Txomin, aunque esta vez el proyecto es de mayor envergadura.

Se trabajará sobre una superficie de 1.250 metros cuadrados (de titularidad municipal) ubicados al final de Arriberri, en el paseo Felix Iranzo y el inicio del camino Sasuategi, en las inmedicaciones de la estación de Iberdrola. Concretamente, se habilitarán 43 plazas para coches y dos zonas para motos. En la zona contigua también se habilitarán otras cinco plazas para coches y un área más para motos.

Para lograr ese drenaje sostenible se recurrirá a una estructura por capas, con distintos tipos de materiales que permitirán que se infiltre el agua de la lluvia. En esas capas se almacenará y después se irá liberando en el subsuelo. El objetivo es que el pavimento del aparcamiento se comporte como el terreno natural de toda la zona de su entorno.

La concejala de Obras y Proyectos, Marisol Garmendia, explicó ayer que se trata de una medida más enmarcada en la lucha contra el cambio climático que sigue los criterios de sostenibilidad que intenta reforzar el Ayuntamiento de Donostia en sus actuaciones. Añadió, asimismo, que han diseñado el proyecto con la ayuda de un alumno de Ingeniería de la UPV/EHU, especialista en drenaje sostenible, que hace sus prácticas en el departamento municipal. El aparcamiento de Arriberri será su proyecto de fin de grado.

La concejala añadió, asimismo, que presentarán esta actuación a una convocatoria de ayudas de la Diputación Foral de Gipuzkoa destinada a intervenciones que fomenten la eficiencia energética y la sostenibilidad.

El proyecto aprobado cuenta con un presupuesto de algo más de 360.000 euros y Garmendia afirmó que espera que los trabajos puedan arrancar en julio para estar completados a finales de año. Junto con el aparcamiento, se acondicionarán también los metros finales de la calle Arriberri, una zona sin pavimentar en la actualidad en la que suelen aparcar los vecinos de la zona. La concejala añadió que esta actuación beneficiará a los residentes del entorno y aliviará los problemas de aparcamiento de esta área de Altza.