- Que sea accesible y se acondicione una zona de ocio y descanso. Estas son las reivindicaciones para la parcela de la antigua escuela de Zubieta que los vecinos de esta calle de Bergara, agrupados en la asociación ZubietaBerri, han puesto una vez más sobre la mesa. En concreto, han solicitado al Ayuntamiento que se elabore un proyecto técnico para el citado solar dentro del proceso de reurbanización integral de la calle, en el que priman “la accesibilidad, el esparcimiento y el interés común”.

El viejo edificio escolar, en desuso desde hace tres años, ha saltado a la primera línea de la actualidad después de que el pasado 26 de diciembre el movimiento Deba Bailarako Kontseilu Sozialista haya ocupado el inmueble para crear entre sus cuatro paredes un espacio, según explican, destinado “a la reflexión, el debate político, la puesta en marcha de dinámicas culturales y la realización de trabajos sociales y sindicales”.

Ante este escenario, los residentes de Zubieta mantuvieron el martes una reunión con el mencionado colectivo y, un día después, el miércoles, se citaron con los responsables municipales. En ambos encuentros pusieron el foco en la falta de accesibilidad que presenta el solar de la antigua escuela, al que se llega a través de un núcleo principal de escaleras empinadas que parten a ras de calle, y no menos dificultosos accesos alternativos. Defendieron, a su vez, darle un uso de “interés común” a la parcela, como ya hicieron público en 2019 ante la propuesta del PNV, en plena campaña electoral, de recalificar este suelo como residencial para permitir la construcción de viviendas.

ZubietaBerri nació con el objetivo de poner freno a las deficiencias urbanísticas de esta transitada calle “en su totalidad”, adecuándola a los parámetros de accesibilidad propios del siglo XXI. La asociación tiene sus antecedentes en la asamblea vecinal que se mantuvo activa durante el proceso de rehabilitación del puente de Zubieta, y que posteriormente también reclamó que se materializara el proyecto de reurbanización de la calle que el Consistorio redactó en 2016.

Ahora vuelven a la carga. “En ese camino de revertir la degradación urbanística de Zubieta, además del comienzo de la obra este año -los presupuestos que se aprobarán el 25 de enero reservan una partida para su ejecución-, hemos acordado con el Ayuntamiento un proceso de revisión de estos trabajos para poder hacer aportaciones que puedan ser recogidas en la medida de lo posible”, detallan los promotores de la asociación.

Estos bergareses entienden, asimismo, que al no cumplir la parcela del viejo centro escolar con los estándares de accesibilidad necesarios “no se respeta el derecho de todos a su uso y disfrute, y mientras eso no cambie, no pondremos en marcha ninguna actividad en dicho solar”. Apuestan, al mismo tiempo, por redefinir la parcela dentro del proceso de reurbanización integral de Zubieta (este espacio, en principio, no está incluido en este proyecto), “priorizando la accesibilidad y el esparcimiento, ya que resulta ser la única zona de toda la calle con potencial para ello”.

En cuanto a las dinámicas que se pudieran realizar en esta área, siendo responsabilidad del Consistorio la gestión de los locales y suelos municipales, proponen que se promueva un proceso participativo para concretarlas. “Un proceso lo más abierto posible, abarcando a vecinos colindantes (Zubieta, Mugerza y San Lorenzo), agentes sociales interesados y el propio Ayuntamiento, con el fin de lograr un acuerdo lo más amplio posible y anteponiendo el interés general”, sentencian.

La que fuera escuela de Zubieta ha mantenido sus puertas cerradas en los últimos años. Jardun Euskara Elkartea fue la última asociación que de forma regulada utilizó este inmueble y, a partir de ahí, ha habido algún que otro inquilino. El Consistorio está a la espera de recibir el informe que determinará el estado del edificio.