- Repleto de críticas y opiniones encontradas. Así se desarrolló el Pleno celebrado el martes entre rigurosas medidas de seguridad. El Gobierno arrasatearra se quedó solo en la aprobación de su propuesta para adaptar el presupuesto municipal a la nueva situación económica generada por el coronavirus. Jeltzales y socialistas calificaron de "prudente" el ajuste presupuestario, mientras que la oposición les acusó de "no haber negociado" con ellos.

En líneas generales, las arcas locales se embolsarán este año 4.711.125 euros menos de lo previsto. Esta merma de ingresos se afrontará con "recursos propios", según adelantó el equipo de Gobierno en la presentación que llevó a cabo la semana pasada para detallar cómo se han reestructurado las cuentas públicas. En la misma comparencia anunció que todos los proyectos previstos "siguen adelante" y los servicios municipales van a mantenerse e, incluso, algunos "reforzarse".

En este sentido, la portavoz del PNV, Anuska Ezkurra, insistió en que han puesto el foco en el ámbito social y destacó "la voluntad" del Gobierno de incrementar la dotación económica para "responder a las necesidades" de la ciudadanía, "porque no vamos a dejar a nadie atrás". Ezkurra se refirió también a las iniciativas de apoyo al comercio local que se han puesto en marcha, y aseguró que otra de "las prioridades" va a ser el empleo, teniendo en cuenta que "la tasa de paro ha subido dos puntos en el municipio".

La portavoz de EH Bildu, Maider Morras, habló de la "preocupación y frustración" de su grupo por el hecho de que, "aunque el Gobierno municipal hable de colaboración de cara al exterior, dentro del ayuntamiento no actúa como tal".

En cuanto al contenido del documento presupuestario, Morras sostuvo que PNV-PSE no son "conscientes" de la magnitud de la crisis que "tenemos ante nosotros". "Algunas familias de Arrasate no tienen suficiente dinero para llenar la nevera con comida", indicó. La edil de la coalición soberanista cuestionó, a su vez, que el equipo de Gobierno haya "comprometido todo el dinero de la hucha del Ayuntamiento para hacer frente a los proyectos cuanto antes".

"Os hemos pedido prudencia con proyectos como el Ecobulevar, que sí apoyamos, pero que planteamos que se dejara sobre la mesa por unos meses hasta conocer el alcance real de la crisis y no comprometer estos 2,5 millones de euros", defendió Morras. Le reprochó, asimismo, a jeltzales y socialistas que hayan tomado "algunas decisiones en contra de los criterios del personal técnico y el interventor municipal", y abogó por dar "prioridad a las necesidades de la ciudadanía, y no a obras que en estos momentos pueden esperar".

En su intervención, el concejal de Elkarrekin Arrasate, Igor Urizar, le echó en cara a PNV-PSE su "falta de capacidad" para el debate, "porque no respondéis a nuestras preguntas". "Preferís gobernar a través de la prensa", les recriminó.

El Gobierno municipal ha recalcado en más de una ocasión la "buena situación económica" de las arcas locales, sin embargo, para Elkarrekin Arrasate "tener superávit no es positivo, sino que demuestra que no se ha empleado lo que se podía en los servicios públicos". "Los datos del paro en la localidad son los peores de los últimos cuatro años; en el caso del colectivo femenino la tasa se sitúa en un 15%. ¿Qué servicios públicos se van a reforzar"?, se preguntó.

Urizar compartió opinión con EH Bildu en torno a "los más de dos millones de euros", que tal y como indicó se han "comprometido para acometer el Ecobulevar". "Ante una gran crisis priorizáis el ladrillo; no sois capaces de ver el problema social que hay", criticó.

Por su parte, el edil de Hacienda, Ander Garay, tomó la palabra para afirmar que "sí" le han dado la opción a la oposición de presentar propuestas, y "no han hecho ninguna". Señaló, además, que "quizá" ambas partes necesitan "voluntad para entenderse". El jeltzale incidió, por otro lado, en que el Ayuntamiento "no ha comprometido todo el remanente de tesorería".