bergara - Las obras de reurbanización de una parte de la calle Amillaga, entre las rotondas del puente de Ondartza y Ernai kalea, afrontan la recta final de su licitación. El Ayuntamiento de Bergara estudia las ofertas de las empresas que se han presentado como candidatas a ejecutar estos trabajos, que traerán consigo la instalación de una nueva red de saneamiento de aguas pluviales, además de la reforma de las aceras, la mejora del pintado en los viales principales y la renovación de las conducciones del alumbrado público y electricidad.

El proceso para acometer la primera fase de estas obras, que comprende la reurbanización del lado izquierdo de la calle Amillaga, en el sentido de salida hacia la variante, se puso en marcha a finales de mayo. Fue el anterior Gobierno de PNV-PSE-EE el que adjudicó la redacción del proyecto, y han sido los actuales responsables municipales quienes han concurrido a las ayudas que concede el Gobierno Vasco, a través del Spri, en el marco del Plan Renove en Polígonos Industriales-Urbanización. Este programa inyectará en esta actuación la cantidad de 150.000 euros, que aliviarán el desembolso económico que efectuarán las arcas locales en esta intervención urbanística, cuya inversión se estima en 449.800 euros.

"Falta de transparencia" Mientras el proceso sigue su curso, las críticas han llovido en boca del grupo municipal del PNV. Los jeltzales aseguran sentirse "absolutamente identificados" con esta actuación que, según señalan, sigue en la línea "del camino que emprendimos en la pasada legislatura, apostando por la renovación de las urbanización de los polígonos industriales". Sin embargo, denuncian la que consideran "una falta de transparencia" por parte del Gobierno de EH Bildu a la hora de darle el visto bueno al citado proyecto. "Hubiéramos querido poder realizar aportaciones durante la fase de redacción, pero el modo y el tiempo elegidos por el Gobierno municipal para la aprobación del proyecto nos ha impedido hacerlo así", afirma la portavoz jeltzale, Elena Lete.

Para el PNV algunos aspectos deben ser analizados "con más esmero". Cuestiona, de esta manera, que se vaya a alejar de la zona residencial la parada de autobuses situada delante de Laino Skate, para habilitarla a la altura de la empresa Fundiciones Recalde. "Esta es una cuestión que entendemos debe darse a conocer a los usuarios para ver con ellos las distintas alternativas, y elegir la que mejor se adapte a sus necesidades", insiste Lete, al tiempo que le reprocha al Gobierno municipal que haya dado luz verde de un "modo absolutamente sigiloso al proyecto sin compartir con los bergareses sus intenciones".

Los jeltzales consideran, asimismo, que una modificación de este tipo debe ser abordada dentro del Plan de Movilidad, y advierten de que en la documentación aportada por el equipo de Gobierno "no se justifica" que el cambio de emplazamiento de la mencionada parada sea "una recomendación del Plan de Movilidad, pese a que EH Bildu ha repetido en numerosas ocasiones que quiere redactar dicho plan".

Por otro lado, el PNV plantea que se estudie si resulta posible que junto a la marquesina hubiera "al menos un aparcamiento accesible para personas con diversidad funcional". "Para el PNV es vital que la accesibilidad del municipio se vea mejorada en cada actuación que realice el Ayuntamiento", recalca Lete.

Por su parte, desde el Gobierno municipal apuntan que la empresa Zetabi presentó el proyecto de urbanización el 12 de noviembre, y que desde ese día y hasta la jornada del 22 celebraron varias reuniones con "representantes particulares y empresas afectadas por las obras". "Una de las condiciones para poder acceder a las subvenciones solicitadas es que los trabajos se inicien en el menor plazo de tiempo posible, y con base en ese propósito hemos actuado", asevera el equipo de Gobierno.

Recuerda, a su vez, que el objetivo de la reurbanización de la calle Amillaga, en el polígono industrial de San Lorenzo, es el "de garantizar todos los criterios de accesibilidad de la zona". "Lamentablemente esto no era posible con las dos paradas de autobús actualmente enfrentadas, por eso ha sido necesario alejar 77 metros la situada del lado izquierdo en dirección a la variante", informan los responsables municipales.

no dan las medidas Sobre la solución adoptada para trasladar la parada de autobuses a la altura de la empresa Fundiciones Recalde, desde el área municipal de Urbanismo inciden en que se trata de una cuestión "técnica" a la que le han dado "muchas vueltas". Tal y como precisan, la disposición en estos momentos de las dos paradas una frente a la otra "dificulta los giros de entrada y salida de los autocares si coinciden uno en cada dirección".

La marquesina y acera actuales, según exponen las mismas fuentes, "no dan las medidas" requeridas de accesibilidad y tampoco de movilidad del servicio del transporte público. De haber mantenido este emplazamiento -matizan- "se hubiera complicado aún más la movilidad interna" de los talleres ubicados en la trasera de la parada, "porque habría que haber intervenido en los aparcamientos".

Con la solución que va a ponerse en práctica se proyectan, por tanto, dos metros de acera y la circulación ininterrumpida de vehículos, aunque los autobuses estén parados en las marquesinas de ambas direcciones.

"El tramo de la calle objeto de este proyecto garantiza la adecuación urbanística del polígono industrial, además de dignificar una de las entradas principales del municipio", reza la actuación diseñada por Zetabi. La intervención permitirá también renovar catorce farolas.

Las obras, una vez adjudicadas, tienen un plazo de ejecución de seis meses. Se prevé que estén en marcha "para verano".