punto de cumplir 70 años, los hermanos eibarreses Paco y Bernardo Pérez Güenaga (son gemelos) hace "más de dos décadas" que dieron inicio a su afición por realizar maquetas. Bernardo siente especial predilección por las réplicas de todo tipo de aviones y Paco, en cambio, disfruta reproduciendo barcos, figuras, tanques y vehículos blindados de la más diversa índole.

La calidad de sus trabajos es conocida en Eibar y en la comarca; hasta tal punto que los hermanos Pérez Güenaga ya han mostrado sus creaciones en exposiciones y eventos organizados para conmemorar diferentes acontecimientos históricos (especialmente relacionados con la guerra civil) en localidades como Eibar, Elgeta, Oñati o Elorrio.

Su última muestra se inauguró el pasado viernes en el Museo de la Industria Armera de Eibar, que hasta el próximo día 25 de abril ofrece a todas las personas interesadas la posibilidad de contemplar 17 maquetas de vehículos y aviones de la II República realizadas por Paco y Bernardo.

Organizada en el marco del programa elaborado por el Consistorio para conmemorar el 90º aniversario de la proclamación de la II República, en la exposición pueden verse nueve vehículos realizados por Paco y ocho aviones hechos por Bernardo.

Las piezas expuestas

Elaborados "tras buscar los planos en revistas de modelismo y realizar el montaje", los vehículos que muestra Paco en el Museo de Portalea son "los llamados camiones improvisados republicanos"; unos vehículos blindados que se utilizaron tanto en la II República como durante el conflicto bélico que sucedió al alzamiento fascista.

Según explica el propio Paco, esos vehículos "de corte militar" se llamaban improvisados "porque cogían los chasis de camionetas, camiones o autobuses y los recubrían de chapas para blindarlos y combatir con ellos". Eso sí, "dado que cuanto más grueso era el blindable más pesados y torpes eran los vehículos, en muchas ocasiones los camiones eran dotados de un blindaje ligero que valía de poco porque en cuanto les lanzaban unos tiros desde cerca las balas atravesaban el blindaje de lado a lado", indica Paco.

De hecho, "en ocasiones recubrían el blindaje con una capa de grasa pensando que de esa forma las balas resbalarían al impactar contra los vehículos", pero en vista de que esa alocada idea no daba el resultado esperado "al final la mayoría de esos vehículos dejaron de emplearse para el combate y fueron utilizados para transportar personas o materiales, como ambulancias o como elementos disuasorios", explica este apasionado de las maquetas.

Por su parte, Bernardo ha realizado "ocho aviones que se utilizaron durante la II República y en la defensa de esta durante la guerra" para la exposición de Portalea.

Según cuenta, sus creaciones constituyen "una pequeña muestra de los más de cien aviones diferentes que había en aquella época". Entre ellos destacan el polikárpov i-15 "conocido como el chato" y el polikárpov i-16 "conocido como la mosca" ya que esos cazas de fabricación soviética "fueron los más eficaces en la defensa de la II República".

Asimismo, en la exposición abierta en Eibar pueden verse reproducciones "de un túpolev sb-2, conocido por el apodo de Katiuska, y de otros aviones de menor calidad bélica como un douglas dc-2, que era un avión de líneas postales aéreas que se transformó en bélico, de un bristol, que era un bombardero ligero de fabricación británica, de un havilland, que era un avión de entrenamiento y de un potez 540, que resultó tal fiasco que pasó a denominarse el ataud volante".