- Los taxistas de Arrasate han mostrado su malestar por la situación de "indefensión" en la que, según aseguran, les ha dejado el Ayuntamiento después de que "haya roto unilateralmente" el acuerdo adoptado en 2005 sobre las guardias nocturnas. Este convenio, tal y como explican, deja en manos de la Policía Municipal las tareas de identificar a la persona que solicita un taxi por la noche y de avisar por teléfono al taxista de guardia. Este último, además, puede decidir si presta o no el servicio en los casos en los que el demandante estuviera "en estado de embriaguez, sin dinero€.", notificando su decisión a la Policía Local.
"Como han dejado sin efecto el acuerdo, la responsabilidad y la atención de la llamada deriva directamente en nosotros, y la única contribución que hace el Consistorio es poner a nuestra disposición un teléfono móvil", se queja el colectivo, que afirma querer seguir atendiendo el servicio nocturno pero "con unas mínimas medidas de seguridad". "Sin dejarnos a merced de aquellos que lo solicitan bajo los efectos de bebidas alcohólicas, tóxicos, sin dinero€. De la noche a la mañana se nos retira la cobertura, dejándonos totalmente desamparados ante situaciones de riesgo", denuncian.
El colectivo incide, asimismo, en las 70 horas semanales de guardias que se les exige, y reivindica que tengan una compensación económica. "Si quieren que estemos toda la noche a la espera de una llamada nos lo deberían pagar. La mayoría de las citadas horas quedan sin retribución alguna; en caso de negarnos a aceptar las condiciones que se nos imponen, se nos amenaza con multas si no estamos disponibles", critican, sin dejar de recalcar que están cubriendo el servicio nocturno "los 365 días al año".
Los diez taxistas que operan en Arrasate también reprochan al Ayuntamiento que "no" haya tenido "una mínima consideración" para ayudar al colectivo a aliviar el impacto de la pandemia en su actividad. Reparan, en este sentido, en el proyecto presupuestario que ha presentado el Gobierno municipal de cara 2021, que recoge una partida de 747.500 euros para el autobús urbano. "Cero euros, por el contrario, para el servicio del taxi", protestan.
Ponen el acento en la situación que están atravesando. Por un lado, ante las consecuencias derivadas del coronavirus y, por otro, debido al incremento en los últimos años de los servicios del transporte público. "No estamos en contra, reconocemos que son necesarios, pero sabemos que muchos de estos autobuses van con pocos pasajeros, a veces casi vacíos. Este refuerzo ha contribuido a que el taxi quede relegado a servicios ocasionales, a que alguien pierda un bus o alguna persona mayor quiera desplazarse hasta el ambulatorio. No podemos sobrevivir así. Si no estamos en la parada es porque no hay trabajo", advierten.
Exponen que las empresas han ido "salvando" al colectivo, pero lo que hasta ahora ha sido un balón de oxígeno se ha visto afectado por la situación que ha generado la crisis sanitaria. Ante esta realidad echan en cara al Consistorio que "no tenga ninguna sensibilidad" hacia ellos, porque "su única preocupación es que demos un servicio nocturno". "Como de día ya lo tienen cubierto con los autobuses, para que no haya quejas de noche quiere obligarnos a hacer guardias gratis y en exclusividad. Esto es inmortal. Al igual que existen subvenciones para otros servicios públicos también debería haber para el taxi de guardia", sentencian.
