- Si no hay contratiempos, las obras de la rotonda que regulará el tráfico en el polígono de Basabe de Aretxabaleta arrancarán “a finales de septiembre”. Esas son las previsiones que baraja el departamento foral de Infraestructuras Viarias que tiene en marcha hasta el próximo jueves el proceso para licitar estos trabajos por un importe de 198.500 euros.

Ordenar el enlace de la GI-627-31 (en el entorno de Eroski) para mejorar la seguridad y simplificar movimientos es el objetivo de esta actuación que acumula un notable retraso. Los trámites necesarios que hay que cumplir para intervenir en suelos que han acogido actividades, en esta caso industriales, potencialmente contaminantes ha prolongado todo el proceso para acometer la citada glorieta. “Pensábamos que con el estudio realizado en su momento en el solar que albergó la empresa Azbe era suficiente, sin embargo, han tenido que hacerse más catas”, explicaron desde la Diputación.

Así, los trabajos consistirán en la construcción de una rotonda de 29,5 metros de diámetro exterior, con una calzada anular de siete metros de anchura y un islote central de 15,5 metros de diámetro. Dispondrá de cinco brazos, cuatro de ellos de doble carril y sentido de circulación, y el quinto (el correspondiente al ramal de salida de la GI-627 dirección Eibar-Gasteiz), de carril único y sentido de entrada a la actual intersección.

Se ocupará también una parte de los terrenos de la antigua Azbe, concretamente de las desaparecidas oficinas, que el Ayuntamiento ha cedido al ente foral para materializar el proyecto. La convocatoria fija en diez semanas el plazo de ejecución.

La nueva glorieta facilitará, igualmente, la circulación de autobuses y otros vehículos pesados que en estos momentos “tienen dificultades para pasar por este punto”, según apuntaron desde el ente foral. Además, se aprovechará la intervención para renovar la señalización y habilitar una acera que dará continuidad a la que llega desde el barrio de Oro.