yer Arrasate debería haber retumbado al ritmo de tambores y barriles. Palillos en ristre, centenares de niñas y niños, cargados de alegría y entusiasmo, hubieran redoblado al unísono sus instrumentos para anunciar la llegada de los sanjuanes. Además, este año el desfile iba a añadir un plus de atractivo: los nuevos trajes que llevan la firma de la diseñadora de moda Amaia Albes. Pero la crisis del coronavirus ha hecho saltar por los aires las fiestas. No se celebró la tamborrada infantil y los nuevos uniformes esperarán hasta 2021 para su puesta de largo.

Ha sido un trabajo "ilusionante", asegura Albes. El año pasado la comisión intersociedades SUDC, que está al frente de la tamborrada, se puso en contacto con ella para que diseñara los trajes con los que se irá renovando la indumentaria de los cuerpos musicales, en muchos casos desgastada por el uso durante décadas. La tercera pata de este proyecto es el Consistorio, que ha destinado una partida económica para renovar la vestimenta y otros elementos del desfile.

En equipo. Codo con codo con los miembros del SUDC y, en particular, con el presidente, Juan Luis Arkauz, y su mujer Mari Carmen. Así se ha desarrollado todo el proceso, capitaneado por la diseñadora arrasatearra, para crear y confeccionar los 54 uniformes de dos compañías, incluidos los de sus respectivos directores o directoras. "Hemos utilizado el mismo patrón, jugando con los colores", explica Albes. El resultado son 27 casacas azules y otras tantas verdes combinadas con un pantalón blanco.

Los nuevos trajes no entienden de género. "Era algo que teníamos claro desde el principio, que las prendas se pudieran utilizar por niños y niñas sin distinción", recalca Albes. El protagonismo se cede, por tanto, a los pantalones.

Se enfrascaron en el proyecto en octubre. El diseño, la elección de los tejidos, las tallas€ En cierto modo ha sido un "hándicap". "Yo me dedico a la alta costura, trabajo a medida, y en este caso ha sido una confección más en serie", detalla Albes. De originales vestidos de novia, madrinas o invitadas de boda, su gran especialidad, a trajes para la tamborrada; creaciones, estas últimas, en las que ha puesto el mismo arte y pasión.

Había dos opciones, enviar los uniformes a un taller de confección o hacerlos en su atelier ubicado en la calle Deba Hiribidea (casas de Gelma). Se decantó por lo segundo y decidió contratar a una costurera, Natalia García, a la que ya conocía. "Entre las dos hemos podido hacer cambios al momento, rectificaciones, mejoras", añade Albes que ha compaginado el encargo del SUDC con su habitual trabajo. "Después de tener listos los prototipos hicimos pruebas reales, con chavales y chavalas de diferentes edades y alturas para ajustar bien las medidas", recuerda la diseñadora arrasatearra.

El proceso ha sido artesanal. Una tarea que García empezó en febrero y que se ha visto alterada por el parón forzoso que provocó el coronavirus. Ahora están rematando las prendas.

También son unisex los uniformes confeccionados para los cuatro personajes que van a caballo: el general o generala (negro con detalles en plata) y las abanderadas, que lucirán los colores de Arrasate en chalecos morados, blusa y pantalón blanco. Este combinado, con pantalón abotonado y de aire elegante, se ha usado para los nuevos trajes de las tres abanderadas de la tamborrada de mayores.

"Ha sido un proyecto especial, dedicado al pueblo y para un acto en el que he tomado parte", apunta Albes. Ya tenían pensado cómo disfrutar del estreno. "Es una pena que no haya podido ser este año", lamenta. Esperan al siguiente. Con igual ilusión.