Hondarribia e Irun buscan ser referentes como destinos turísticos inteligentes a nivel de Euskadi para el año 2025. Se trata del principal objetivo del Plan de Dinamización Turística que la agencia de desarrollo Bidasoa Activa presentó ayer y que impulsará la actividad de uno de los sectores más potentes de la comarca en el próximo lustro.

La redacción del documento, a cargo de la empresa Gura Neuromarketing, estaba a punto de finalizar cuando estalló la pandemia en marzo del año pasado. "No nos dio tiempo a presentarlo", recordaba Jon Elzo, de Gura, que explicó que, por fortuna, en estos meses se han podido reorientar los objetivos y las acciones del plan a las nuevas circunstancias.

En cuanto a los cambios que la era covid ha provocado en el plan, Elzo aseguró que se tratan principalmente de ajustes en los mensajes promocionales y en las actividades turísticas que se plantean a los visitantes. Aún así, el consultor aseveró que éste verano "costará atraer al turista extranjero".

En el plano concreto, el documento propone hacer énfasis en la desestacionalización del sector, en evitar la masificación, promover las oportunidades de turismo de naturaleza y cultural que ofrece la comarca con propuestas como el Irun romano o la villa medieval de Hondarribia y en establecer como públicos objetivos interesantes a las "parejas exploradoras", aquellas con inquietud por ver todas las opciones que ofrecen sus destinos, y a los visitantes senior. Elzo también mencionó que contar con Ficoba supone una gran oportunidad para promover el turismo de negocios.

La vicepresidenta de Bidasoa Activa, María Serrano, incidió por su parte en el aspecto participativo del plan, por el que se prevé crear una Mesa de Turismo que incluya a representantes del sector privado. En la misma línea, el presidente de la entidad, Miguel Ángel Páez, subrayó la importancia de trabajar en red y de nutrirse de las necesidades de un sector que, opinó, "se recuperará con fuerza".