- La rehabilitación de la envolvente del edificio de Emigración, ubicado en el barrio de San Miguel, finalizará en las próximas semanas, previsiblemente "para finales de mayo", como anunció ayer la delegada de Obras de Irun, Cristina Laborda. Con un coste de más de medio millón de euros, estos trabajos constituyen un primer paso para dos futuras actuaciones: la rehabilitación de los bajos del inmueble para que acoja usos para los vecinos del barrio y la adecuación de los pisos superiores, en los que se habilitarán unos 40 apartamentos para jóvenes.

En el caso de los más de 500 metros cuadrados de la planta baja, el pasado mes de febrero el Ayuntamiento abrió un proceso participativo para definir sus usos. El consenso mayoritario de los participantes instó entonces al Consistorio a destinar los bajos de Emigración al traslado del local de mayores y de la asociación de vecinos de San Miguel, a la creación de un nuevo haurtxoko y a la habilitación de salas polivalentes.

Además, este abordaje de la planta baja del edificio también incluirá una "actuación de encuentro urbanístico con el barrio", en palabras del alcalde José Antonio Santano, con la que el Gobierno pretende que la continuidad entre la calle y en inmueble sea más natural, integrándolo en el paisaje del entorno.

Con esos criterios en mente, el área de Obras trabaja ya en adelantar los pliegos para la contratación de la redacción del proyecto de rehabilitación de ese espacio. Una vez el documento esté listo, solo quedaría sacar la obra a concurso y, como recordó el alcalde, la actuación ya tiene dinero presupuestado para este 2021.

El primer edil también anunció que el Ayuntamiento está negociando con Lanbide el traslado de las oficinas que tiene en el inmueble a otra ubicación, lo que dejaría libres en torno a otros 700 metros cuadrados para más usos vecinales y sociales. En todo caso, esta posibilidad no frenará el desarrollo que ya está en marcha del resto de la planta baja.

El progreso de los trabajos de la renovación de la fachada del singular inmueble es visible desde hace ya unas semanas y para el alcalde lo que está apareciendo es "el edificio que recordaba de niño". Y es que, como aseguró la directora técnica de Obras, Ana Baena, el inmueble está protegido por el Plan General, por lo que la renovación de la fachada ha respetado el aspecto de la cubierta original.