La Mancomunidad de Debabarrena ha dado luz verde al presupuesto de 2023, que asciende a 15.934.486 euros, lo que significa un incremento del 7,01% con respecto a 2022 (1.043.921 euros más). El presidente del ente mancomunidad, Iosu Arraiz, señaló que estas cuentas pretenden “afianzar el compromiso y la apuesta de la mancomunidad para la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030, además de continuar aumentando la tasa de recogida selectiva en la comarca, que en estos momentos se encuentra en el 54,69%”.
Se realizarán, de este modo, mejoras en la recogida de residuos sólidos urbanos, entre las que se incluyen la contratación de varias personas durante seis meses con el objetivo de reducir los impropios en los contenedores de la fracción orgánica, y se reforzará también el servicio de limpieza viaria en Eibar con el uso de dos hidrolimpiadoras.
Asimismo, en Deba y Mutriku se mantendrá el refuerzo de la limpieza de calles con la incorporación de un peón más durante los meses de junio a septiembre. Crece, a su vez, la dotación para sustituciones de personal en caso de bajas, permisos y vacaciones, así como la correspondiente partida para el mantenimiento y reparación de vehículos.
En este escenario, el principal esfuerzo económico de los presupuestos se concentra en las partidas asignadas a la recogida selectiva y gestión de las basuras. En este capítulo se inyectan 9.317.800 euros que representan “más de mitad de las cuentas” (121.180 euros más que en 2022). La limpieza viaria, por su parte, es el segundo servicio con mayor presupuesto, un total 4.484.943 euros.
Sostenibilidad energética
Por otro lado, el proyecto presupuestario reserva partidas por valor de 41.000 euros para desarrollar el Plan de Sostenibilidad Energética y estudiar la viabilidad de transformación de la flota de vehículos, con el fin de seguir fomentando modelos más sostenibles. Se contempla también la digitalización de servicios y la reforma de la estación de transferencia de Eibar.
