El portavoz del PP en las Juntas Generales de Gipuzkoa, Juan Carlos Cano, ha criticado que los ingresos que obtendrá la Diputación foral con los nuevos peajes para camiones en la N-1 y A-15, que les hará "pagar hasta tres veces más de lo que pagan" en la actualidad, "supera con creces la cantidad necesaria para el mantenimiento de las carreteras".

En un comunicado, Cano ha opinado que "es muy probable que la Diputación de Gipuzkoa emplee lo obtenido por implantar peajes por todo el Territorio para, precisamente, sufragar los elevados costes de las instalaciones necesarias para ello".

Tras conocer los detalles del anteproyecto de Norma foral elaborado por la Diputación, Cano ha recordado que "en el origen del sistema de pago por uso de las carreteras guipuzcoanas se encuentran los costes por el mantenimiento de la N-1 y la A-15, sin embargo los ingresos que se prevén con la extensión de los peajes por la totalidad de las dos carreteras, superan con creces la cantidad necesaria para ese mantenimiento, haciendo pagar a los camiones hasta tres veces más de lo que pagan por peajes en la actualidad".

Cano ha reiterado que probablemente ese "excedente que se va a dar" sirva para "pagar el mamotreto de arcos y medios arcos que deberán instalarse por toda Gipuzkoa para que todos los camioneros paguen por circular por el Territorio".

A su juicio, los responsables forales "están empeñados en convertir Gipuzkoa en una ratonera de la que no escape ningún transportista sin pagar y, si para ello hay poner arcos por todas las entradas y salidas, se ponen". "Han perdido el norte, su objetivo inicial de pago para el mantenimiento de las infraestructuras viarias, que era lo único que permitía Europa, un objetivo que quedaría sobradamente cumplido incluso con una cantidad bastante menor de lo que se cobra en la actualidad", ha considerado.

Cano ha instado al Gobierno foral a "abandonar la prepotencia y el resentimiento y a sentarse a negociar con el sector del transporte porque, con un peaje mucho menos cuantioso, se cubren las necesidades de la Diputación y se da algo de aire a los transportistas, que ya viven bastante ahogados".