Bertsolari Txirrita renovará sus tuberías para evitar atascos

donostia - El Ayuntamiento de Donostia invertirá 475.000 euros en la renovación de las tuberías de cerca de medio kilómetro de la calle Bertsolari Txirrita, en Altza, continuamente afectada por atascos y filtraciones de la red de saneamiento. Los trabajos darán comienzo, según el calendario previsto, hacia el mes de junio y durarán unos cinco meses, por lo que seguirán hasta finales de año. Dada la envergadura de la operación, está previsto suspender temporalmente los aparcamientos de esta populosa vía urbana con el fin de no tener que cerrar totalmente al tráfico la carretera, que tiene un único sentido de circulación y es un eje fundamental del barrio.

Los trabajos para renovar la red de aguas fecales, así como la de distribución de agua potable, han salido a concurso recientemente y el Ayuntamiento tendrá en cuenta no solo el precio ofrecido por las empresas sino, también, las características de la obra para que puedan reducir las afecciones a los vecinos.

En concreto, los trabajos afectarán al tramo situado entre los números 2 y 38 de Bertsolari Txirrita, en el margen izquierdo del sentido de circulación del vial. Según los estudios realizados en la zona, la red de saneamiento se encuentra en estado precario y ha ocasionado repetidos problemas y filtraciones, lo que ha obligado a la intervención de los servicios municipales en varias ocasiones. Los especialistas han tenido que desatascar el colector y llevar a cabo reparaciones, además de limpiar los sumideros.

La red de distribución de agua potable, por su parte, es de material de fundición, actualmente considerado obsoleto, y ha tenido distintas averías además de roturas de la vieja tubería y escapes en las válvulas y acometidas.

La obra prevista por el Ayuntamiento incluye las dos tuberías -de aguas fecales y de agua potable- y también la renovación del cableado de las farolas. Los trabajos, además, se aprovecharán para cambiar la pavimentación de las aceras.

Los trabajos de renovación de los servicios subterráneos se llevarán a cabo en dos fases. La primera comenzará por el espacio comprendido entre el número 22 de la calle, donde se ubica la casa de cultura, y el número 38.

La segunda fase corresponderá al tramo entre el edificio del número 2 y el 22. En la zona hay una gran cantidad de servicios que quedarán afectados como los del gas, electricidad y teléfonos, que la obra deberá cuidar especialmente para que no resulten dañados.