Ni el velódromo Antonio Elorza, ni el Kursaal, ni la plaza de la Constitución. El espacio más polivalente de Gipuzkoa es la plaza mayor de Ordizia. Es conocida por acoger todos los miércoles la feria semanal más importante del país, pero el resto de los días de la semana se utiliza para actos de lo más variopintos. Lo mismo vale para un roto que para un descosido: en septiembre acogió una exhibición de atletismo en la que participó Naroa Agirre, hace dos semanas un concierto de Su Ta Gar y ayer un campeonato de voley playa. Son las ventajas de tener una plaza cubierta. De hecho, en otras localidades están empezando a cubrir sus plazas y parques.

La localidad goierritarra se les adelantó casi un siglo. Si Ordizia goza de una plaza cubierta, es gracias a su afamada feria de los miércoles. Un incendio destruyó la villa en 1512 y, a raíz de este trágico suceso, la reina Juana la Loca concedió a Ordizia “la real facultad para que pudiera celebrar mercado franco semanal todos los miércoles del año”. El mercado se asentó definitivamente en el siglo XVIII y la llegada del tren dio un enorme impulso, tanto a la feria como a la localidad goierritarra.

Tanto, que la gente empezó a pedir que se cubriese la plaza. Así, en 1925 se construyó la singular estructura de hormigón que se ha convertido en todo un símbolo de Ordizia.

Mientras en otras localidades tienen que echar mano de frontones y polideportivos cada vez que llueve, en Ordizia disfrutan desde hace 90 años de un espacio público cubierto y abierto durante las 24 horas del día.

Y 90 años dan para mucho. Desde 1925, la plaza de Ordizia ha sido testigo de todo tipo de actos. Pero cuando creía que lo había visto todo, los ordiziarras le han vuelto a sorprender. Ayer, por primera vez en su larga historia, acogió un torneo de voley playa. Para lo que no valga esta plaza... Eso es polivalencia y lo demás son tonterías.

Diez equipos mixtos El torneo lo organizaron cinco establecimientos hosteleros de la villa: Martínez, Pottoka, Pías, Haizpe y Amonane. El campeonato arrancó a las 10.00 horas y concluyó hacia las 21.00. Participaron diez equipos mixtos, formados por cuatro jugadores cada uno. Además, varios jugadores de la sección de voley playa del Bera Bera ofrecieron una exhibición.

El técnico de Deportes del Ayuntamiento, Kike Mokoroa, estaba encantado. “Con este acto, le hemos puesto el punto y final al programa Udaberria Martxan. Soy tolosarra y en mi pueblo llevan cinco años organizando un torneo de voley playa. Les propuse a los hosteleros organizar uno similar y les gustó la idea”.

La plaza les pareció un lugar ideal. “Es un lugar ideal para todo tipo de actos. Está en el centro del pueblo y no hay que andar a expensas del tiempo”, comentó.