Cientos de pensionistas se han concentrado este sábado en Donostia para recibir bajo la lluvia a los ciclistas que han participado en la última etapa de la marcha ciclista organizada por el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria para exigir "pensiones públicas, dignas, justas y suficientes".

Esta movilización "festiva y reivindicativa", que ha recorrido durante trece días diferentes localidades de la CAV, Navarra e Iparralde, ha concluido este mediodía en los jardines donostiarras de Alderdi Eder.

Varios cientos de pensionistas han recibido a los ciclistas que han cubierto la última etapa de la marcha que, según han asegurado sus organizadores, ha sido un "éxito" a lo largo de sus 700 kilómetros.

Andrea Uña, portavoz del Movimiento de Pensionistas de Bizkaia, ha querido dejar claro que "este es el principio" y que "vendrán más luchas" hasta lograr sus reivindicaciones.

Ha asegurado que los pensionistas llevan "cuatro años y medio en la calle" para defender el sistema público de pensiones, reivindicar una pensión mínima de 1.080 euros en 14 pagas y apoyar el reparto de las tareas de atención y cuidados.

El recibimiento al último pelotón ciclista ha finalizado con una manifestación que ha recorrido las principales calles del centro de Donostia, bajo el lema Recortes de pensiones no. 1.080 pensión mínima.

Al término de la marcha, el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha hecho público un comunicado en el que asegura que "hoy la dignidad viene con el maillot amarillo pensionista" y advierte de que el colectivo tiene "energía suficiente para seguir en la calle el tiempo que sea necesario hasta conseguir sus objetivos".

Los pensionistas reclaman, de nuevo, a las instituciones vascas que "hagan lo que sea preciso para garantizar unas pensiones dignas y unos servicios públicos universales".