- El consejero vasco de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, se mostró ayer a favor de la propuesta del Fondo Monetario Internacional FMI de subir temporalmente los impuestos a las multinacionales con beneficios excesivos para financiar políticas públicas, lo que “vendría bien a todos”, ya que facilitaría que todas las sociedades “pagaran un mínimo, sobre todo las grandes”.

En una entrevista concedida a Onda Vasca, Pedro Azpiazu recordó que este incremento puntual de los tributos es una idea en la que se trabaja “desde hace bastante tiempo” y que la han barajado tanto la OCDE como la UE. Se trataría de un tipo mínimo efectivo del 15% que, para Azpiazu, “no es excesivamente elevado”. “Yo creo que puede ser más que aceptable y, además, esto nos permitiría, por lo menos, que todas las empresas pagaran un mínimo, sobre todo las grandes, que son las que más evaden impuestos”, manifestó.

En el terreno fiscal, el titular de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco se refirió a la reclamación que la oposición realiza de manera constante de abordar una reforma fiscal. Azpiazu recordó que ya se hizo una reforma en 2018 y que ahora es necesario reflexionar sobre el impacto. “Habrá que ver la economía, la recaudación y ver lo que hay que hacer. Pero si queremos seguir con políticas públicas como hasta ahora, no observo una bajada de impuestos”, advirtió.

En esta línea, explicó que Euskadi busca un “modelo de cohesión” en el que haya menos diferencias y menor riesgo de pobreza. “Si queremos esto necesitamos recursos”, matizó.

Y de ahí, preguntado por la política fiscal de Ayuso en Madrid, destacó que los modelos vasco y madrileño no son comparables y defendió el Impuesto sobre Sociedades de Euskadi, porque “es bueno para las empresas y nos ha funcionado”. “Madrid pretende bajar impuestos pase lo que pase. Cada uno deberá responder. Nosotros queremos un país cohesionado”, sentenció.

El consejero vasco de Economía y Hacienda envió en la misma entrevista un mensaje optimista sobre la evolución de la economía de Euskadi. La invasión en Ucrania y la elevada inflación están teniendo consecuencias, admitió Azpiazu, pero insistió en que el PIB sigue creciendo y de forma sólida, lo que permitirá crear empleo.

“Estamos bastante peor que si no hubiera habido invasión, pero estamos en torno al 4,5% de crecimiento”, apuntó, para añadir que este ritmo “nos va a permitir generar empleo”.

De este modo, y de manera general, afirmó que “más vale ver el vaso medio lleno y no ponernos en plan catastrofista. La realidad nos irá diciendo qué va a pasar. El crecimiento va a ser sólido”.

Azpiazu insistió en que es mejor ir viendo cómo evoluciona la situación ante la dificultad de hacer previsiones a largo plazo. De hecho, recordó que el propio Fondo Monetario Internacional realizó este martes una corrección a la baja de las estimaciones a nivel mundial.

En el caso del Estado español, la previsión quedó rebajada al 4,8%. Son dos puntos menos que el cálculo anterior, la misma rebaja prevista por el Gobierno Vasco. “Es una bajada importante, pero seguimos creciendo por encima del 4% y de forma sólida”, reconoció Pedro Azpiazu.

Ante la incertidumbre y la posibilidad de que haya nuevos nubarrones en el horizonte, aconsejó no precipitarse. “Analizaremos el futuro y si hay que afrontar más situaciones lo haremos. Tenemos recursos para ello”, zanjó.

En este sentido, el consejero recordó las estrategias puestas en marcha ya por el Ejecutivo vasco, como el plan de 500 millones de euros presentado por el lehendakari y los tres diputados generales o el último, con un montante de 200 millones de euros, aprobado en Consejo de Gobierno.

De ahí que no entienda las críticas sobre el uso del remanente que se han producido en los últimos días. No se trata de medidas generales, sino de “ver el problema y diseñar la política que corresponda”. En este sentido, pidió ser “responsables” y “no disparar con perdigón”. “El remanente se toca permanentemente. No entiendo las críticas duras”, señaló.

Una de las variables que preocupa es la elevada inflación. El consejero de Economía reconoció que es “muy difícil” controlarla. En su opinión, desacoplar la electricidad del gas puede corregir una parte importante, pero también es importante la política monetaria del BCE y el compromiso colectivo. “Que haya un acuerdo de manera que comprendamos la situación, hagamos sacrificio y se compense después cuando las cosas vengan bien dadas”, señaló Azpiazu.

Ligado a esto, Azpiazu no ve apropiado subir los sueldos al nivel de la inflación, que en estos momentos roza el 10%. No tiene dudas de que los sueldos deben subir pero la subida acorde al IPC, en este instante, “no es responsable”. “Sería mejor más una subida vinculada a la inflación subyacente” que en la actualidad está en torno al 3%. “Corrijamos la inflación y, si hacemos ahora un sacrificio, que se compense en el futuro”, concluyó.

“Más vale ver el vaso medio lleno y no ponernos en plan catastrofista”

Consejero vasco de Economía y Hacienda