La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha afirmado que el Gobierno vasco entrará en el capital de la nueva ITP-Aero "siempre y cuando" haya un pacto de accionistas que recoja de "forma clara" que se garantice su arraigo en Euskadi y el empleo.

Así se ha pronunciado Tapia en el pleno de control de este viernes en el Parlamento Vasco al ser interpelada por el parlamentario de Elkarrekin Podemos-IU Jon Hernández por la compraventa de ITP-Aero a un fondo norteamericano y la posibilidad de que el Gobierno vasco entre en el nuevo accionariado.

Hernández también ha reclamado a la consejera que exija a la compañía que reincorpore a los 83 trabajadores de las plantas de PCB-ITP de Barakaldo y Sestao que fueron despedidos en un ERE que ha sido declarado nulo por el Tribunal de Justicia del País Vasco, más cuando el Ejecutivo está planteando entrar en el accionariado del grupo.

El parlamentario de Elkarrekin Podemos ha asegurado que su grupo respalda la posible entrada del Ejecutivo en la empresa pero ha indicado que ello no solo debe estar condicionado al arraigo social y fiscal de la misma a Euskadi sino también a que se mantenga el empleo y los derechos laborales.

Tapia ha insistido en que el principal objetivo del Ejecutivo en su posible entrada en el accionariado es que se garantice un proyecto industrial de futuro para ITP, su arraigo en Euskadi y que sea tractor para toda la cadena de valor, y también el mantenimiento del empleo tanto directo como indirecto.

Ha afirmado que están trabajando para que esos requisitos estén fijados en un "pacto de accionistas" con el objetivo de que existan mecanismos de garantía para su cumplimiento.

Ha remarcado que han puesto también sobre la mesa reclamaciones como el mantenimiento de la confianza en el equipo humano que existe en estos momentos, tanto directivo como plantilla, y la colaboración con la cadena de suministro vasca, entre otras cuestiones.

Y ha añadido que el Gobierno vasco va a utilizar todas las herramientas a su alcance para lograrlo, entre ellas su posible participación en el capital, "siempre y cuando el pacto de accionista recoja de forma clara estos aspectos".

Ha confiado en que esa aportación tenga también un "efecto positivo" en los trabajadores afectados por el ERE. "En este momento requerimos que la empresa continúe trabajando con las personas que tiene en su plantilla", ha añadido. Finalmente ha apostado por el diálogo "sincero" entre las partes frente a la judicialización para resolver los conflictos laborales.