El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado que Euskadi "está preparada" para afrontar los retos económicos en "la etapa postcovid" y ha puesto a la planta alavesa de Talgo como ejemplo "del compromiso con la industria y la tecnología" al haber logrado afianzar su carga de trabajo hasta 2023.

El lehendakari y la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, han visitado este miércoles las instalaciones de la empresa Talgo en la localidad alavesa de Rivabellosa para conocer la marcha de la fase final de la construcción de 30 unidades del tren de "muy alta velocidad", "Talgo Avril".

Este modelo puede alcanzar una velocidad máxima de 360 kilómetros por hora y tiene capacidad de hasta 581 plazas. Compuesto por 12 coches y 200 metros de longitud, está siendo homologado para poder circular también en Francia.

Tras el recorrido por la factoría que emplea a 650 trabajadores, Urkullu ha subrayado la aportación de esta planta a "fortalecer el ecosistema industrial vasco" al ser "uno de los polos de dinamización social y económica de Araba y de Euskadi".

Además, ha apuntado que las expectativas del sector de equipamientos ferroviarios, que ocupa a 11.000 personas en Euskadi, son buenas al no haberse paralizado los contratos y mantenerse la facturación, el empleo y los niveles de exportación. Este año, según ha explicado, la inversión de estas empresas se mantendrá en un 4 % de su facturación.

Urkullu ha subrayado que esta visita deja claro que además de tener como prioridad preservar la salud pública el Gobierno vasco comparte con las empresas el esfuerzo por mantener la actividad económica, la producción industrial y el empleo.

"Estamos preparados para etapa postcovid. Para seguir mejorando el ecosistema económico de Euskadi y para superar los retos de la nueva industria verde y digital", ha dejado claro al poner a Talgo como un "buen ejemplo de compromiso con la industria, la tecnología, la innovación, la sostenibilidad y la internacionalización".

El presidente de Talgo, Carlos de Palacio, que ha acompañado a la delegación del Gobierno vasco durante su visita, ha recordado que la planta alavesa es el "corazón y el cerebro" de la compañía y ha asegurado que en la época actual "marcada por la incertidumbre", la empresa continúa haciendo "lo que mejor sabe: trabajar, trabajar con ilusión y con compromiso para generar riqueza, valor y empleo para el entorno".

Ha apuntado que la entrega de cada nuevo tren es "motivo de un orgullo infinito" y se ha referido al "Talgo Avril" para ensalzar que se construye en Araba. "Es un tren de vanguardia en Europa y del que nos sentimos muy orgullosos", ha señalado.

De Palacio ha recordado que este y el resto de proyectos en los que la compañía está involucrada en Alemania, Dinamarca y Países Bajos han llevado a aumentar la producción en un 40 % y a llegar al máximo de su capacidad hasta alcanzar la fabricación de 400 coches para este año.

"Queremos seguir creciendo y asegurar el mejor futuro para la compañía, para esta planta y su entorno, y para nuestro equipo. Queremos seguir uniendo allá donde nuestros trenes lleguen", ha deseado.

Además de en el tren de muy alta velocidad, la planta alavesa está inmersa en entregar el pedido de los primeros 23 vehículos Talgo 230 que suministrará a Alemania para unir Berlín y Amsterdam.