- El servicio de estudios del BBVA considera que entre este año 2020 y el próximo 2021 se perderán 22.000 empleos en la Comunidad Autónoma Vasca. Estos datos no serán peores gracias a las políticas públicas adoptadas, con medidas como los ERTE o la concesión de financiación blanda a las empresas, se recuerda con motivo de la presentación del informe de coyuntura del País Vasco elaborado por el BBVA que tuvo lugar ayer.

Rafael Domenech, de BBVA Research, destacó que “las políticas públicas han impedido una mayor destrucción de empleo” y resaltó que los territorios, caso de la CAV, con un menor endeudamiento, han podido adoptar más medidas de apoyo a la economía.

En todo caso, el servicio de estudios del BBVA considera que la economía del País Vasco no podrá recuperar sus niveles previos a la crisis en términos de PIB hasta al menos 2022. Su previsión es una caída del PIB de Euskadi del 10,5% este año y un crecimiento del 5,8% en 2021.

El responsable de Análisis Económico del BBVA Research, Rafael Domenech, acompañado del director de la Territorial Norte de BBVA, Carlos Gorria, presentó de forma telemática el informe Situación País Vasco.

Domenech recordó que estas estimaciones suponen una revisión a la baja respecto a las realizadas por la entidad el pasado mes de julio, que apuntaban a un reducción de la actividad económica del 10% ese año y un repunte del 6,7% en 2021.

Las incertidumbres derivadas de los rebrotes del COVID y la particular evolución de algunos sectores industriales con mucho peso en la economía del País Vasco “dificultan el retorno de las exportaciones como motor de la economía vasca”, señaló BBVA.

Como ejemplo se encuentra el sector de la automoción, particularmente afectado no solo por la menor demanda por culpa del COVID-19 en los principales países europeos, sino por la compleja transición hacia el vehículo eléctrico.

Con todo, en el servicio de estudios de la entidad financiera se considera que en 2020 el impacto de la crisis será menor en Euskadi que en el conjunto de la economía del Estado español, donde se prevé una caída del PIB del 11,5%, con especial incidencia en los territorios más turísticos como las islas. Sin embargo en 2021 la recuperación será más baja en la CAV que en el Estado, donde se estima un crecimiento del 6%.

Aunque la evolución prevista para 2021 es positiva en Euskadi, el crecimiento del 5,8% en el PIB estimado para la economía vasca no sería suficiente para recuperar el nivel de actividad económica previo a la crisis, que se encontraría aún un 5,6% por debajo del observado al cierre del ejercicio de 2019.