- El sector de la máquina herramienta prevé cerrar este complicado 2020 con una caída de facturación del 20% y una captación de pedidos con una reducción aún mayor que cifra en un 40%. El duro golpe que ha representado la pandemia del coronavirus para la actividad industrial incide de lleno en este sector, cuya producción se centra en proporcionar equipos para que otras empresas fabriquen.

AFM Cluster, que reúne a los fabricantes de máquina herramienta de todo el Estado entre los que la presencia vasca es mayoritaria, celebró ayer su asamblea anual en Donostia y, con este motivo, su presidente, César Garbalena; y su director general, Xabier Ortueta, presentaron los resultados de 2019 y las perspectivas que manejan para el presente ejercicio y el siguiente.

Ambos emplearon un tono moderadamente positivo ya que, a pesar de admitir que 2020 será un año “difícil” en ventas y “muy complejo” en captación de pedidos, situaron el inicio de la recuperación en el último trimestre del presente año para tomar impulso en los primeros seis meses del siguiente.

Eso sí, al tener como clientes otras empresas, advirtieron de que todo dependerá de la evolución que presenten sectores como la automoción, la aeronáutica, el ferrocarril, los bienes de equipo o la energía, entre otros. De momento, y fruto de la crisis económica que ha generado el COVID-19, cifraron en alrededor de 300 millones la reducción de ventas.

Este número significa disminuir en un 20% la facturación, un porcentaje que no se ha disparado gracias, según dijeron, a que las compañías de máquina herramienta disponen de una cartera de pedidos que alargarán durante el año. Sin embargo, preocupa el bajón de encargos, concentrado en los tres últimos meses, que les conduce a prever una caída del 40% durante este año.

Ante este difícil escenario, César Garbalena apuntó las medidas que, en opinión de AFM Cluster, pueden contribuir a que el golpe sea más llevadero. Entre ellas, aludió a aquellas que garanticen la financiación de las empresas. Si bien consideró que la situación del sector es más fuerte que la registrada antes de la crisis anterior de 2008, también advirtió de que los próximos meses serán complicados y requerirán de acceso a la financiación “hasta que los usuarios de máquina herramienta vuelvan a invertir”.

Por otro lado, citó la importancia estratégica de la internacionalización que durante la pandemia se ha paralizado, pero que AFM confía en que se recuperará de manera paulatina durante el presente ejercicio y con un ritmo más acelerado en 2021. Por este motivo, Garbalena abogó por que “ICEX y administraciones locales cuenten con programas abundantes y flexibles que empujen a las empresas”.

Una tercera necesidad hace referencia a otro de los ejes de la competitividad empresarial como es la innovación. En este sentido, aludió a que en la situación actual en la que la actividad se ha ralentizado, “es fundamental contar con recursos suficientes para seguir investigando y desarrollando aplicaciones innovadoras”, para lo que lanzó una invitación a las administraciones para colaborar entre todos en el relanzamiento de la I+D.

Por último, Garbalena se refirió al empleo y señaló que “las personas son un activo irremplazable”, sobre todo en un sector como el de la máquina herramienta que requiere de perfiles cualificados para desarrollar su actividad.

Esta especialización se encuentra en la base del esfuerzo que realiza el sector para conservar el empleo y que apuesta por mantenerlo, para lo que pide “medidas de flexibilización que permitirán salir con fuerza cuando el momento llegue”.

A este respecto, Xabier Ortueta indicó que el impacto de la anterior crisis de 2008 en el empleo del sector de la máquina herramienta fue menor que en otras actividades y adelantó que las empresas que han tenido trabajo no han empleado los ERTE en esta ocasión, aunque no descartó que en los próximos meses el bajón de pedidos les impulse a hacerlo.

Respecto a las medidas fiscales, tanto Garbalena como Ortueta lanzaron una idea que en anteriores ocasiones han planteado y siguen reivindicando. Con el ejemplo de Italia, reclamaron que las administraciones fomenten la reinversión de beneficios en la renovación y digitalización de los equipos de la propia empresa. En el caso italiano, las organizaciones pueden amortizar en exceso la reinversión en equipo productivo, en un 140% para los industriales y en un 250% en los conectados.

De aplicarse esta medida en el Estado, “la industria actualizaría su maquinaria para poder seguir siendo competitiva y, además, tendría un efecto multiplicador”, señalaron los responsables de AFM Cluster, para añadir que “tras este parón debemos generar un formidable proceso de recapitalización industrial”.

“Nos hemos sabido adaptar e incluso en este periodo de crisis hemos vendido un 75%”

Presidente de AFM Cluster

“Hay partido, vamos a pelear. Se trata de aguantar unos meses y luego nos recuperaremos”

Director general de AFM Cluster