La economía vasca se contrajo un 3,2 % y el empleo el 2,8 % durante el primer trimestre de este año respecto al mismo periodo de 2019 por el parón de la actividad durante la segunda quincena de marzo por las medidas de contención de la covid-19.

Este porcentaje de descenso es dos décimas superior al anunciado en el avance de las cuentas trimestrales que hizo el Instituto Vasco de Estadística (Eustat) a finales de abril cuando predijo que la recesión del Producto Interior Bruto (PIB) de Euskadi iba a ser del 3 % entre enero y marzo.

El empleo en los tres primeros meses de 2020 ha descendido en la comunidad autónoma un 2,8 % en relación al mismo trimestre del año anterior y un 3,8 % respecto del pasado invierno, los retrocesos más altos de la serie histórica de las cuentas trimestrales elaboradas por el Eustat.

Por territorios, la evolución negativa del PIB ha sido muy similar, con caídas del 3,3 % en Álava, del 3,2 % en Bizkaia y del 3,1 % en Gipuzkoa.

El descenso interanual del PIB vasco coincide con la última estimación para la Zona Euro-19, pero está por encima del previsto para el conjunto de la UE-27 (-2,6 %), pero por debajo de España, que retrocedió un 4,1 %. Respecto al último trimestre de 2019, la economía de Euskadi ha decrecido un 4,7 %.

Por sectores, la industria ha sufrido una bajada interanual de su actividad del 3,6 %, porcentaje que sube hasta el -4,9 % si se compara con el último trimestre de 2019. Dentro de ella, la industria manufacturera ha decrecido con mayor intensidad, con tasas del -4,3 interanual y del -5,2 % intertrimestral.

La actividad en el sector servicios entre enero y marzo ha roto la senda de crecimiento de los trimestres anteriores, con una contracción interanual del 2,8 % y del 4,2 % respecto del último trimestre de 2019.

El comportamiento de los servicios no ha sido homogéneo. El comercio, la hostelería y el transporte presentan el mayor descenso, de un 4,2 % en relación al mismo trimestre del año anterior y de un 5,7 % con respecto al trimestre previo.

La administración pública, educación, sanidad y servicios sociales, en cambio, han registrado un crecimiento interanual de un 1,2 % y las actividades englobadas en el resto de servicios, como actividades inmobiliarias, de profesionales, científicas y técnicas, financieras y de seguros, han sufrido un retroceso del 4 % en términos interanuales y de un 5,4 intertrimestral.

La construcción ha sufrido un retroceso del 2,7 % con respecto al mismo trimestre de 2019 y del 4,9 % sobre la actividad del sector entre octubre y diciembre de 2019.

Desde el punto de vista de la demanda, esta ha tenido un comportamiento prácticamente igual de negativo que el total del PIB, con una contracción del 3,1 %.

El consumo se contrajo un 3 % interanual y un 4 % intertrimestral, dado que el privado cayó un 4,8 % respecto al mismo trimestre de 2019 y un 5,9 % respecto del último de ese mismo año. Por su parte, el consumo público ha experimentado un crecimiento del 4,1 % y del 3 %, respectivamente.

La inversión ha bajado un 3,6 % respecto a la del mismo trimestre del año pasado y un 5,4 % sobre la del trimestre precedente.

El saldo exterior de la economía vasca también ha empeorado entre enero y marzo, meses en los que las exportaciones han decrecido un 7,5 % y las importaciones un 7,3 % en términos interanuales.

Por lo que respecta al empleo, el descenso del 2,8 % (3 décimas menos del previsto en el avance de las cuentas) ha sido el más acusado en la serie histórica de las cuentas trimestrales del Eustat, al igual que la caída intertrimestral del 3,8 %, y eso que del cómputo se excluyen a los afectados por los ERTE.

La evolución interanual del empleo ha sido negativa en todas las ramas de actividad tanto en términos interanuales como intertrimestrales. El sector primario ha presentado un descenso del empleo del 1,4 % y del 1,7 %.

El retroceso interanual ha sido tanto en la industria como en el de la construcción de un 3,4 %, aunque en términos intertrimestrales el comportamiento del primero (-3,5 %) ha sido menos desfavorable que en el segundo (-5,4 %).

Por último, en los servicios los puestos de trabajo han evolucionado también de forma negativa, con un descenso interanual del 2,7 % e intertrimestral del 3,8 %.