Un total de 93 barcos de bajura de pesca de la anchoa del Cantábrico, que comenzó este lunes, ha obtenido para los próximos cinco años la recertificación Manine Stewardship Council (MSC).

Según ha anunciado la entidad certificadora de pesca tras cinco años de su certificación inicial la pesquería ha logrado la recertificación para la anchoa pescada con redes de cerco en el Golfo de Vizcaya que realizan los barcos de las organizaciones OPEGUI, OPESCAYA, OPACAN, CERCOASTUR y Sociedad Cooperativa Gallega del Mar Santa Eugenia.

La flota engloba un total de 93 barcos de bajura, de los cuales 47 son de Euskadi, 35 de Cantabria, seis de Galicia y cinco de Asturias. Así, si la entidad mantiene sus prácticas y niveles de sostenibilidad, que serán auditados cada año, la anchoa podrá mantener su certificado de sostenibilidad.

De este modo, las anchoas podrán ser comercializadas con la etiqueta MSC. La recertificación ha sido llevada a cabo por el certificador independiente Bureau Veritas, que ha evaluado la pesquería según los tres principios del estándar medioambiental del MSC: la salud de la población de peces pescada, el impacto de la pesquería en el ecosistema marino y la efectividad de la gestión de la pesquería.

En el nuevo proceso de recertificación, la pesquería ha obtenido una puntuación superior a 80 en cada uno de los 28 indicadores sobre el desempeño de MSC, es decir que están al nivel de "mejores prácticas" en todos los aspectos medioambientales, de modo que según informa MSC no ha sido necesario establecer ninguna condición de mejora.

Hace cinco años comenzaron con la certificación un total de 50 barcos de Bizkaia, Guipuzkoa y Laredo mientras que en la actualidad suman casi el doble (93 barcos), al unirse las flotas de Castro Urdiales, Colindres, Santoña, San Vicente y Comillas en Cantabria; de Santa Eugenia de Ribeira, Ribeira, Cambados y Porto do Son en Galicia; y de Avilés, Lastres, Luarca y Gijón en Asturias.

El director de Pesca y Acuicultura vasco, Leandro Azkue, ha subrayado que la flota del Cantábrico comienza la campaña de la anchoa en medio de una crisis sanitaria, por lo que los arrantzales afrontan una campaña cumpliendo los protocolos sanitarios y con responsabilidad.

Por ello, considera que "ahora más si cabe es fundamental" que los consumidores elijan producto local y sostenible, como acredita la certificación MSC.

La secretaria de la Federación de Cofradías de Pescadores de Guipuzkoa, Miren Garmendia, ha subrayado que los pescadores de anchoa del Cantábrico llevan años defendiendo una pesca responsable, con un arte de pesca que es el cerco selectivo.

Así, ha añadido que en los últimos cinco años se han unido nuevas flotas y barcos a la certificación y ha asegurado que en estos momentos "complicados" siguen trabajando para que la pesquería de la anchoa sea reconocida internacionalmente por su calidad, por su origen y porque ha sido capturada "de forma sostenible y respetuosa con el mar".

Finalmente, la responsable de MSC para España y Portugal, ha definido este como un momento "sin precedentes" en el que se ha puesto de manifiesto "lo importante que es mantener sistemas alimentarios sanos y sostenibles".

"El compromiso continuado por la pesca sostenible de todas las cofradías involucradas en el certificado es muy buena noticia para los océanos, para las comunidades que dependen de la anchoa y para los consumidores de pescado", ha concluido.

Los principales mercados de venta son el Estdo español (tanto en fresco como en conserva), Reino Unido, Francia, Alemania y Bélgica. En el ejercicio 2018-2019, el volumen comercializado de anchoa con sello azul fue de 1.216.000 kilos (producto terminado equivalente a 4.500.000 de peso vivo), un 97 por ciento más que el año anterior.