- La carga de trabajo de los asesores económicos estas tres semanas se ha triplicado en comparación con el pico más alto, que habitualmente se registra en julio, pero no es su volumen el factor que más les preocupa, sino la inseguridad jurídica de las medidas decretadas que puede inducir a cometer errores de forma inconsciente, y la maraña de documentación que exigen presentar lo que va a retrasar con total seguridad la recepción de las ayudas que prometen las instituciones.
El guipuzcoano Josu Tolosa, miembro de la comunidad de despachos profesionales del Colegio Vasco de Economistas-Ekonomistak, del Registro de Economistas Asesores Fiscales REAF, del Registro de Economistas Forenses Refor y del Registro de Expertos Contables REC, ejerce de portavoz del colectivo vasco de asesores fiscales, laborales y contables muy descontentos con la aplicación real de todas las líneas de ayudas que todas las instituciones, tanto estatales como vascas, presentan como método para sostener la actividad económica en el territorio.
"La economía es como un tren de carbón que circula cuesta arriba. En el momento en que se para, o le allanas el camino o no va a arrancar", emplea como metáfora para incidir en que, en la actualidad, lo que necesita el tejido económico es una inyección de liquidez. "Pero que sea real, porque ahora no está llegando dinero y tardará en hacerlo si no se simplifican los procedimientos", advierte.
Como uno de los últimos ejemplos cita las ayudas de 3.000 euros a los autónomos inscritos en el RETA que anunció Lanbide el pasado martes, y que al día siguiente no era posible gestionar. La razón es que uno de los requisitos consiste en que el solicitante presente el certificado de cese de actividad, cuando a pesar de haberlo pedido con mucha antelación, aún no han recibido respuesta, critica Tolosa.
"De agilidad, nada, todo lo que han hecho ha sido complicar los trámites, y lo que necesitamos es que se simplifiquen al máximo" para que la inyección de liquidez imprescindible en estos momentos llegue a la mayor brevedad, advierte el economista. Más si cabe de tener en cuenta que la mayor parte de los clientes de este colectivo en Gipuzkoa son pequeñas empresas o cooperativas, micropymes y autónomos, un sector al que los vaivenes económicos afectan con mayor virulencia que a las grandes empresas, con más músculo financiero.
Son muchos los casos de inoperatividad que expone. Uno de ellos es el ERTE por fuerza mayor, que en principio iba a ser contestado en el plazo de cinco días y "a día de hoy solo hemos recibido una notificación" de la treintena que su asesoría, AseLagun, ha presentado. En este sentido, también recuerda que "un día nos despertamos por la mañana con que los trabajadores tenían que inscribirse en Lanbide y nos acostamos con que no era necesario".
En los casos de cese de actividad, correspondiente a los autónomos, Josu Tolosa lamenta nuevas complicaciones. Los socios tienen que gestionar a través de la mutua este trámite y, por lo general, estas mutuas "actúan cada una de una forma diferente y algunas hasta cambian cinco veces los impresos de solicitud". Su asesoría ahora recibe las primeras aprobaciones del alrededor de centenar de solicitudes de cese de actividad presentadas.
Son solo algunos ejemplos que cita para denunciar la "enorme incertidumbre" que generan unas medidas adoptadas con urgencia con "cambios legislativos muy poco claros" y sin un sistema de gestión detrás capaz de actuar con eficacia. Según ha constatado Tolosa, las instituciones públicas, para tramitar todas las solicitudes, "siguen un procedimiento normal de comprobación cuando la situación no es normal".
Por este motivo, y como portavoz del colectivo, reclama a las instituciones "salidas y gestiones claras y concretas", además de una mayor interlocución con los asesores económicos, que son los más cercanos a las empresas, cooperativas y autónomos con dificultades.
Instituciones. Las asesorías y despachos profesionales tienen como principal reivindicación hacia las instituciones responsables una mayor claridad en las medidas que decretan, pero no es su única exigencia. También demandan que las gestiones que se deben realizar para cumplimentar las solicitudes sean mucho más simples y con una mayor concreción. Además, piden un mayor reconocimiento a su profesión, dado que este colectivo es el más importante mediador entre el mundo empresarial y el institucional.
Empresa. Los asesores laborales, fiscales y contables se dirigen a los empresarios para solicitarles, sobre todo, comprensión y paciencia ante las dificultades que entraña su trabajo actual.
"Pedimos a empresarios, cooperativistas y autónomos comprensión y paciencia"
Miembro de Ekonomistak
