donostia - El grupo Siemens Gamesa tiene previsto hacer un ajuste de entre 20 y 25 personas en las oficinas de Zamudio, que como se había anunciado concentran una parte reducida de los 408 despidos planteados en todo el Estado español, apenas un 5% del total. La empresa ya había avanzado que el recorte de personal se va a centrar en el área de mantenimiento y en el personal de investigación, de forma que se espera un impacto importante en las oficinas de Iruñea y Madrid. Una parte muy significativa de las salidas previstas a nivel estatal corresponderán a trabajadores subcontratados por ETT, aunque también habrá un buen número de fijos afectados.

El fabricante de aerogeneradores pretende despedir a partir del día 23 a 6.000 trabajadores en todo el mundo, que en el caso de España se limitan al área de mantenimiento y oficinas sin que se produzcan ajustes de personal en las plantas productivas. De esta forma, quedan al margen del proceso las fábricas de multiplicadoras de Mungia y Asteasu, así como la planta de palas de Aoiz, en Navarra.

El foco del ajuste se trasladaba así a las sedes y oficinas de Gamesa situadas en Zamudio, Sarriguren en Navarra y Madrid -el grupo cuenta también con una oficina comercial en Santiago de Compostela-.

Sin embargo, no todos los despidos previstos en España afectarán al personal de investigación, puesto que también se prescindirá de trabajadores de mantenimiento, lo que hace aun más complicado intuir cómo se repartirá geográficamente el ERE que echará a andar el día 23 según ha previsto la firma. - Adrián Legasa

6.000 despidos. Siemens Gamesa ha anunciado un ajuste de personal en 24 países del mundo que, en el caso de España, afectará a 408 personas. El ERE se empezará a negociar el día 23 pero se desconoce cómo se repartirá el ajuste entre los centros de trabajo del conjunto del Estado.

Euskadi, ajuste mínimo. En la sede central de Zamudio se producirán entre 20 y 25 despidos, según los datos que manejan los sindicatos. En el caso guipuzcoano de Asteasu y el vizcaino de Mungia, en cambio, se mantiene la plantilla. Es de prever que las oficinas de Iruñea, con más de mil empleados, sufrirán un recorte de personal importante, así como la sede de Madrid.