Amezketa se volcó para celebrar el título logrado por Jokin Altuna. Horas después de la final manomanista, los vecinos del pelotari aguardaron la llegada del campeón a su localidad natal para obsequiarle con bertsos, un aurresku en su honor y varios detalles. Altuna III pudo recibir así el aplauso de los demás amezketarras, que en anteriores finales no habían podido brindarle su apoyo por las restricciones para evitar la propagación del coronavirus, e incluso tuvo que hablar desde el balcón del ayuntamiento.