EINTRACHT FRANKFURT Trapp; Tuta, Hinteregger, Ndicka; Knauff, Jakic (Rode, 89), Sow, Kostic; Lindstrom (Hauge, 73), Kamada (Touré, 81), Santos Borré (Aché, 89).

BARCELONA Ter Stegen; Araujo, Eric Garcia, Piqué (Lenglet, 23), Jordi Alba; Sergio Busquets, Pedri, Gavi (De Jong, 62); Adama (Dembelé, 62), Ferran, Aubameyang.

Goles 1-0, m. 48: Knauff. 1-1, m. 66: Ferrán Torres.

Árbitro Srdjan Jovanovic (Serbia). Amonestó a Kostic, Jakic y Tuta . Expulsó a Tuta por doble amarilla.

Estadio Deutsche Bank Park.

- Un gol de Ferrán Torres salvó un empate para el Barcelona ante un Eintracht Fráncfort que se había puesto con ventaja con un golazo de Ansgar Knauff y que en la primera parte había tenido contra las cuerdas al equipo catalán a base de intensidad y despliegue físico.

Si el primer tiempo fue para el Eintracht los minutos finales fueron para el Barcelona que, sin embargo, no pudo sacar ventaja de su superioridad numérica después de que el Eintracht se quedara con diez por expulsión de Tuta.

En la primera parte, el Barça tenía más la pelota pero no tenía control ni llegada y el Eintracht lanzaba ataques rápidos tras cada recuperación.

La hoja de estadísticas al término de la primera parte daba dos datos que decían mucho de cómo se había desarrollado el partido: el Barcelona había tenido un 64% de posesión de pelota, pero solo había disparado dos veces con dirección a puerta frente a ocho del Eintracht.

Ya en el segundo tiempo, en el minuto 48, el Eintracht se fue en ventaja con un remate a la escuadra desde fuera del área de Ansgar Knauf aprovechando un rebote tras un córner. Poco después el Eintracht tuvo la oportunidad del segundo en los pies de Lindström.

En el 62 Xavi Hernández movió el banquillo. Gavi, que tenía problemas con la intensidad en los balones divididos, dio paso a Frenkie de Jong y Adama a Dembelé.

Dembelé inició la jugada del empate. Le puso el balón en el área a Ferran que marcó tras una pared con De Jong. Los dos nuevos respondieron de inmediato. El Barcelona empezó a ganar en seguridad y el Eintracht empezó a acusar el desgaste físico.

En el 79, el Eintracht se quedó con diez hombres por expulsión de Tuta, que vio su segunda tarjeta amarilla por una falta contra Pedri. A partir de ahí todo parecía servido para el Barcelona que monopolizó la pelota.

Al final el Eintracht escuchó agradecido el pitido final, aunque las ocasiones perdidas en la primera parte le dejan seguramente un sabor agridulce. El Barcelona, por su parte, pese a los problemas que atravesó, tuvo para más y ahora queda en situación de resolver la eliminatoria en el Camp Nou.

Partidos de ida