barcelona - El entrenador Pablo Machín fue destituido ayer junto a su cuerpo técnico por un RCD Espanyol que quiere reconducir la situación e intentar salvar al equipo del descenso, después de la derrota del equipo blanquiazul el pasado domingo en el campo del Leganés (2-0).
En un comunicado hecho público ayer por la mañana, el conjunto espanyolista asegura que esta decisión es "fruto del rendimiento deportivo" del primer equipo, y con la "clara voluntad de reconducir la situación actual" del conjunto blanquiazul en la Liga, colista y a cinco puntos de la salvación. También han sido relevados de sus funciones el resto de integrantes del cuerpo técnico: Jordi Guerrero, Jordi Balcells y Carles Martínez.
Pablo Machín se despidió de todos los estamentos del club catalán por medio de las redes sociales y afirmó que el fútbol, en ocasiones, "no es buen trabajo igual a resultados".
El técnico soriano subrayó que llegó a la entidad periquita "con la máxima implicación e ilusión" de poder ayudar. "Despedirse de un club nunca es fácil, menos aún cuando confías en un proyecto y centras todo tu esfuerzo y trabajo en él", apostilló en su nota, acompañado de una foto en la que el técnico se golpea el pecho.
Machín agradeció el trato y la confianza desde que llegó al cargo hace dos meses y medio tanto a los jugadores como a los directivos, sin olvidarse de los seguidores. "Quiero agradecer a toda la afición el cariño y el respeto que me han hecho sentir, tanto en el campo como fuera de él", comentó.
Además, el exentrenador del Espanyol insistió en que "en todo momento" ha hecho lo que ha considerado "mejor" para el equipo y para el club. "Tenemos que seguir adelante. Tenéis que seguir adelante", aseveró.
Por último, Machín se refirió a la posibilidad de apuntalar la plantilla en el mercado de invierno: "Hay tiempo para conseguir el objetivo (en referencia a la permanencia en Primera División) y los refuerzos ayudarán".
Pablo Machín es el segundo entrenador destituido en el Espanyol en esta temporada, después de un David Gallego elegido como sustituto de Rubi y al que relevó por la irregularidad en la Liga pese a que el catalán metió al equipo en la Liga Europa, superando la fase de clasificación.
Gallego entrenó al equipo en las ocho primeras jornadas, con un balance de una victoria, dos empates y cinco derrotas -sumando cinco puntos de 24 posibles (20,83%)-. En la Liga Europa, tras lograr el billete, dirigió al equipo en las dos primeras jornadas de la fase de grupos, con una victoria y un empate.
Por su parte, Machín cogió al equipo en octubre y, en la Liga, ha dirigido diez partidos con un balance de una victoria, dos empates y siete derrotas -con cinco puntos de 30 posibles (16,67%)-. En la Liga Europa, ha jugado cuatro partidos con dos triunfos, un empate y una derrota. - E.P.
