donostia - "Ojo también con Gorka Izagirre. En Llodio y Elorrio lo vi muy bien y ahora está aún más fuerte porque ha corrido bastante. Será peligroso", descifra Felipe Orts cuando piensa en los rivales que le pueden atosigar en el estatal de ciclocross, que se disputará mañana en Pontevedra. En el circuito de la Isla de las Esculturas, Orts no quiere quedarse petrificado ante la indudable pujanza de Gorka Izagirre, un rutero con espíritu de ciclocrossista desde la cuna. Hijo de José Ramón Izagirre, campeón de España en 1991 y 1992, el corredor del Astana ha mamado la especialidad, en la que compite de maravilla. En la presente campaña ha conquistado el Campeonato de Euskadi disputado en Lezama además de imponerse en Garai, Abadiño y Ormaiztegi, su localidad natal. "He competido bien. El objetivo es estar delante. He ganado cuatro carreras y al estatal voy con ilusión, pero sin presión. Quiero hacerlo bien", expone Izagirre, que emplea la modalidad invernal como preparación de la campaña de ruta.
El guipuzcoano es una amenaza real para el alicantino, si bien el de Ormaiztegi opina que "Orts es el gran favorito para la victoria. Está uno o dos peldaños por encima del resto". Izagirre desea un circuito embarrado, donde mejor se desenvuelve, para medirse a Orts. "No conozco el trazado, pero si puedo elegir, que haya mucho barro", anuncia. Además de Izagirre son varios los corredores que tratarán de hacer descabalgar a Orts. Ismael Esteban -campeón en 2017 y 2018-, Kevin Suárez -subcampeón en 2016 y 2017- y Aitor Hernández -oro en 2013 y 2015- buscarán dar la sorpresa. "Ismael Esteban y Kevin Suárez van a llegar muy bien", establece Orts, que pretende reeditar el triunfo logrado el pasado curso en el mismo circuito, reformado para la ocasión.
Izagirre no se pone un objetivo concreto para el estatal, pero durante el curso ha evidenciado que está preparado para competir con los mejores. "Mi idea es luchar y dar todo lo que pueda. Esta temporada me estoy sintiendo muy bien y he podido batir a rivales como Ismael Esteban o Kevin Suárez", enmarca el de Ormaiztegi que dará por concluida su incursión en el barro en Galicia. Sus retos se cincelan sobre el asfalto. "Mi idea es estar bien en la París-Niza. Tengo una espina clavada con la carrera. Será mi objetivo principal", desgrana Izagirre. El de Ormaiztegi fue tercero en la edición de 2018 de la carrera de la Costa Azul y el pasado año se vio obligado a abandonar por culpa de una caída. "Después correré las clásicas de la Ardenas con más libertad antes de encarar el Giro, donde me tocará trabajar", describe el guipuzcoano.
En féminas, el cartel de favorita recaerá en Lucía González, la gran dominadora de la temporada. Aida Nuño será su máximo escollo.
