IDK Gipuzkoa71
Tenerife72
IDK GIPUZKOA Cousseins-Smith (3), Kraker (13), Laura García (12), Edwards (16), Toch Sarr (12) -cinco inicial- Lara González (6), Nystrom (2), Erauncetamurguil (0) y De Souza (7).
CIUDAD DE LA LAGUNA TENERIFE Bintou (2), Atkinson (20), Traore (7), Weaver (7), Pierre Louis (23) -cinco inicial- Bettencourt (3), Moss (3), Pedrals (0), Herrera (4) y Montenegro (3).
Parciales 15-17, 12-21, 27-15 y 17-19.
Árbitros Olivares Bernabéu, Carpallo Miguélez y García Crespo.
Incidencias Partido jugado en el Gasca.
donostia - Nuevo golpe para el IDK Gipuzkoa. Uno más dentro de una temporada que está siendo durísima para el conjunto de Azu Muguruza, que se aferra a los partidos como puede, rema y rema... hasta quedarse siempre con las ganas. Ayer cayó por un punto (71-72) frente al Ciudad de La Laguna Tenerife, lo que supone su tercera derrota por la mínima en sus cuatro últimos partidos en el Gasca y un nuevo revés dentro de los finales apretados a los que se está acostumbrando casi cada semana. Con la consecuencia de que su balance se queda en 6-13, con solo dos victorias sobre el descenso. El final de temporada no va a ser nada sencillo para el conjunto guipuzcoano, que tendrá que encontrar la manera de ganar al menos un par de partidos si quiere continuar en la Liga Femenina más dura de los últimos años.
El encuentro de ayer fue una montaña rusa. Comenzó dominando de forma muy clara el Tenerife, que imponía su abrumador poderío físico y ganaba por 18 puntos (17-35) avanzado ya el segundo cuarto. El IDK estaba muy tocado, pero se aferró a su defensa, fue encontrando poco a poco opciones en ataque y se puso a dos puntos (43-45) mediado el tercer cuarto. Volvió a estirar el marcador el equipo visitante (45-53), momento en el que el IDK hizo un increíble parcial de 16-0 con protagonismo de Toch Sarr, Laura García y Kraker para voltear por completo el marcador. Llegó a ir ganando de nueve (66-57), pero una nueva pájara en los minutos decisivos provocó otra derrota. Tuvo incluso una última opción para ganar, pero De Souza falló. Toca levantar de nuevo la cabeza.
