san Pedro seguirá compitiendo el año que viene en la Liga ACT. Esta frase que puede resultar incluso manida, ha estado cerca de ponerse en peligro esta temporada. La Libia lleva ininterrumpidamente ocho años partiéndose el pecho en la máxima competición del remo del Cantábrico, con mejor o peor suerte, pero allí, con los mejores. Este verano, en cambio, la permanencia ha llegado tarde, demasiado tarde para los corazones morados más sensibles, aquellos que, seguramente, hayan visto ganar a su trainera querida varias Conchas.
Uno de los sanpedrotarras que más ha sufrido con la trayectoria de su trainera esta campaña ha sido Antxon Corman, presidente de la entidad pasaitarra, que en su primer año como cabeza más visible de la entidad reconoce haberse quitado “un gran peso de encima” el pasado domingo con la consecución de la permanencia.
“El comienzo de temporada no fue positivo, y esto tuvo mucha influencia en el coco de los chavales. Ha sido una Liga muy competida, tanto por arriba como por abajo, y esa tensión no nos ha dejado hacer nuestro trabajo como querríamos”, explica el mandatario.
Uno de los factores que mayor lógica podría dar al mal inicio de curso es la renovación interna que hubo, en especial por la incorporación de un nuevo míster, Hegoi Intxauspe. Al respecto, Corman afirma que “si bien es cierto que con la entrada del nuevo entrenador ha habido un cambio en el estilo de remar y unas variantes tácticas, en los entrenamientos estábamos contentos con los tiempos que marcábamos. Creo que fueron los agobios de los malos resultados los que dificultaban que se pudiera encontrar la tecla que recondujera la situación”. Tras un primer mes y medio de competición aciagos, cuando peor estaba la Libia, las tornas cambiaron en Zarautz: “Esa semana nos reunimos con la plantilla y nos transmitieron que las sensaciones eran buenas y que el problema no era deportivo o físico. Intentamos mantener la tranquilidad y fuimos a entrenar un par de días al propio campo de regateo. El empujón que nos dio ese fin de semana fue grande, porque nos ratificó que éramos capaces de competir y estar con los mejores”.
Lo corroboraron los dos fines de semana siguientes y han mantenido una categoría que no sería la misma sin ellos. “Tras Hondarribia y Urdaibai, somos el tercer club más veterano de la ACT”, recuerda su presidente. Corman valora de manera positiva la campaña, puesto que “ha sido un año difícil, porque la igualdad hace que no te puedas despistar ni un segundo y el nerviosismo nos ha superado por momentos, pero sabíamos que nuestro lugar no estaba tan abajo”.
disfrutar en la concha Tras la tempestad, llega la calma. Ahora la Libia disfrutará de La Concha, pero sin renunciar a ella: “Para tres posiciones, lucharemos varios equipos”.