donostia. Concluyó la primera jornada del Parejas y lo hizo con otro resultado ajustado en Eibar. Oinatz Bengoetxea y Ladis Galarza derrotaron a Jon Jaunarena, sustituto de emergencia del lesionado Juan Martínez de Irujo, y Abel Barriola (22-19), resultado que les permite igualar con Titín III y Merino II al frente de la clasificación del torneo. Solo tres tantos de renta que no fueron más porque el zaguero de Baraibar, en su estreno en un campeonato de Primera, cometió once errores, cifra que no supieron aprovechar sus rivales, que completaron un mal encuentro y lo pagaron con la derrota. Aunque bastante ajustada para los escasos méritos que acumularon ayer, día de Navidad, en el frontón Astelena.

El enfrentamiento tenía varios alicientes. Los principales, la participación en el choque de tres pelotaris naturales de Leitza (una localidad de apenas 3.000 habitantes pero con un alto índice de deportistas de elite) y el estreno en Primera de Ladis Galarza, zaguero de Baraibar de 22 años e hijo del que fuera campeón del Manomanista en un par de ocasiones en los albores de la década de los 90 (amén de otros grandes éxitos). También destacaba la ausencia de Juan Martínez de Irujo, compañero de Barriola para el torneo, pero que ayer no pudo actuar en Eibar al tener la mano derecha inflamada (dolencia que arrastra desde el pasado 14 de diciembre, fecha en la que disputó y perdió la final del Cuatro y Medio de la LEP.M ante Aimar Olaizola).

Con todos estos ingredientes, el menú se presentaba más que apetitoso. Pero no lo fue. De la quema solo se salvó Oinatz Bengoetxea, el único que concluyó el choque con unos buenos números: 12 tantos en su haber (4 conseguidos con el saque) y solo 3 errores. En cambio, su compañero y sus rivales no cumplieron con las expectativas creadas. Ladis Galarza evidenció que tiene mucha potencia e incluso dominó a Barriola en muchos tantos. Sin embargo, acumuló once errores, casi todos ellos en la recta final del choque. Los nervios le jugaron una mala pasada y comprometieron seriamente su victoria, a pesar de disponer de un 21-14 a su favor. Más vale que apareció Oinatz Bengoetxea para arreglar el desaguisado cuando, sin hacer nada del otro mundo, Jaunarena y Barriola se habían metido en la pelea por el triunfo.

Mención especial merece la actuación de la combinación de leitzarras. Jon Jaunarena sustituyó a Irujo y no aprovechó su oportunidad. Se le vio nervioso, casi más que a Ladis Galarza, a pesar de que ya había jugado partidos de este nivel en ediciones pasadas del Parejas, y solo terminó el tanto con éxito en una ocasión. Eso sí, fue un soberbio dos paredes de sotamano tirándose al suelo que sirvió para provocar una de las ovaciones más sonoras de la grada en toda la tarde. Jaunarena tampoco encontró demasiada ayuda en su paisano y mentor, Abel Barriola. El zaguero de Leitza no rayó al nivel que lo venía haciendo en los últimos días y se vio superado en todo momento. Al menos le echó valor y coraje al asunto y, pese a que no fue buena su actuación, aportó algo de aplomo en la parte final del choque para maquillar el choque e incluso soñar con la victoria.