- La bailaora y coreógrafa española Rocío Molina ha sido galardonada con el León de Plata por la Bienal de Danza de Venecia por sus coreografías “vanguardistas, singulares y de una potencia innata”, mientras que el León de Oro fue para el japonés Saburo Teshigawara.

Los premios fueron aprobados ayer por la junta directiva de la Bienal, que aceptó la propuesta de Wayne McGregor, director de la sección de Danza, y se entregarán durante el 16 Festival Internacional de Danza Contemporánea Boundary-less, que se tendrá lugar en Venecia del 22 al 31 de julio de 2022

En las motivaciones del galardón, la Bienal destacó el flamenco radical de Molina, artista invitada a teatros y festivales de todo el mundo y que estrenará el 27 de julio en Venecia su nueva creación, titulada Confesión de la Carne, y que es “una batalla entre su cuerpo volcánico y cinco músicos en vivo”.

“Las coreografías de Rocío Molina, vanguardistas, singulares y de una potencia innata, fusionan el flamenco tradicional con los estilos de la danza moderna e impulsos, improvisaciones que caracterizan su alfabeto de baile. Molina, de hecho, ha acuñado un lenguaje artístico personal basado en la recalibración del flamenco tradicional que respeta su esencia y acoge lo auténticamente nuevo”, explicó el director.

McGregor destacó que la bailaora española “conjuga en sus obras virtuosismo técnico, investigación contemporánea y riesgo intelectual” y que sus coreografías son “eventos escénicos que no temen el encuentro con otras disciplinas y otros artistas, a partir de ideas y formas culturales que van del cine a la literatura, de la filosofía a la pintura”.

La artista es “desbordante en las ideas, en las colaboraciones y más aún en su baile. Yendo de lo salvaje a lo sensual, a lo vertical, a lo paralelo, a lo violento, a lo tierno en una extraordinaria explosión de energía física y creativa, Rocío Molina es una fuerza a tener en cuenta, en el arte y en la vida”.