San Telmo Museoa acoge desde hoy en la sala Laboratorio la exposición San Sebastian eta Fantasma, un conjunto de obras del artista errenteriarra Oier Iruretagoiena. Este trabajo se enmarca dentro de la segunda edición de Artea Abian, un programa conjunto de Kutxa Fundazioa y el propio museo, y podrá visitarse de manera gratuita hasta el 9 de enero.
La muestra se ha dado a conocer esta mañana en el mismo lugar en el que se encuentra ubicado, en un acto en el que, además del propio Iruretagoiena, han participado la directora de San Telmo Museoa, Susana Soto; la directora de Arte de Kutxa Fundazioa, Ane Abalde y el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Donostia, Jon Insausti.
Esta exposición esta compuesta de once obras, de las cual ocho han sido creadas específicamente para la misma y otras tres son piezas previas del artista. Como su propio título hace intuir, la muestra se divide en torno a dos hilos conductores; por una parte, la figura de San Sebastián, con la que se vinculan los trabajos ubicados en las paredes y, por otro, el concepto de fantasma, presente en la instalación sonora en el suelo.
El recorrido comienza en la pared izquierda de la sala, donde se ubican dos de las piezas de Iruretagoiena más antiguas; una de ellas con orejas en relieve y otra en la que figura una pareja. Precisamente decidió disponerlas ahí por tratarse de la "pared más común", en palabras del propio artista, en referencia a que no se hicieron pensando en la temática del proyecto. Completa esas obras una cruz situada en el suelo, de estética similar. Todas ellas reflejan "una especie de ataque o violencia", al estar representadas con grapas, tira fondos y golpes de martillo, un testimonio metafórico del martirio del santo.
La misma idea se sigue vislumbrando en las paredes del fondo y de la derecha de la sala, donde continúa la muestra; en este caso, con dos murales de plástico con imágenes de una escultura de San Sebastián del propio museo y unas estructuras de madera y papel maché en forma de listones o ensamblajes.
La experiencia se completa con una veintena de auriculares conectados a la instalación eléctrica del suelo, que retransmiten el sonido de una radio en directo. Están programados a un volumen alto "que puede hacer daño en el oído", indica Iruretagoiena, aunque él los ha planteado para que no se muevan. Por tanto "crean un efecto de murmullo en la sala", haciendo presente al fantasma del título.
Materiales
La madera y el papel maché, también conocido como cartón piedra, son los principales materiales utilizados en estas composiciones artísticas. "Elegí cartón piedra porque generalmente lo relacionamos con algo que es falso", manifiesta Iruretagoiena; "sabía que mucha gente lo iba a relacionar en seguida con algo que tiene una apariencia pero que no es. En este caso, enseñan claramente lo que son, toda su estructura interna", comenta, en referencia a los ensamblajes. También se ven, aunque en menor medida, el plástico y materiales menos comunes como tinta, vino, cabellos o cinta adhesiva, entre otros.
La muestra se completa con un catálogo, que estará disponible el próximo 28 de octubre. El retraso en la edición se debe a que, tal y como expresó Soto, el museo quería que "tuviera algunas imágenes de la propia exposición". Además, incluye un texto de la historiadora Carmen Pardo que, si bien "no explica" el trabajo expuesto, sí se trata de un "material complementario que se ha hecho en paralelo", según Iruretagoiena. "La dos cosas han crecido a la vez", resume.
Esta segunda edición de Artea abian viene precedida por la inaugural de 2020, en la que se contó con la participación de la artista Nagore Amenabarro. Este proyecto conjunto entre Kutxa Fundazioa y San Telmo Museoa se puso en marcha en el 2019, en un "nuevo impulso al acuerdo de colaboración" que ya mantenían ambas entidades y "de la constatación de una necesidad en el panorama artístico guipuzcoano", afirmó Abalde, el de "dar espacio a carreras de artistas" con trabajo "reconocido", pero sin oportunidad previa de exponer individualmente en "una institución museística".
