- El actor francés Michel Piccoli, considerado uno de los grandes nombres del cine de su país, falleció el pasado día 12 a los 94 años, según confirmó ayer su familia. Autor de inolvidables papeles en clásicos del cine como El desprecio, de Jean-Luc Godard; Bella de jour, de Luis Buñuel, o La gran comilona, de Marco Ferreri, Piccoli falleció por un accidente cerebral.

En el universo de las estrellas del cine francés, de Alain Delon a Jean-Paul Belmondo, Piccoli supo hacerse un hueco, el de un personaje normal, un antagonismo sobre el que desarrolló una enorme carrera centrada en su camaleónica capacidad de encarnar cualquier personaje. Quizá por ello Francia le consideró un actor excepcional, pero le negó los premios más prestigiosos, como los César, que nunca le recompensaron pese a sus cuatro nominaciones. Nada que perturbara a este actor de oficio, formado en la escuela Simon, que vio su nombre junto a casi todos los grandes directores del cine francés, pero que también trabajó con figuras importantes de otros países, en Italia, cuyo idioma dominaba bien, o España, con Luis García-Berlanga, o en la etapa francesa de Luis Buñuel.

Piccoli se preocupó de que su trayectoria incluyera trabajos con jóvenes directores y arriesgó en papeles en los que, por su perfil, no parecían escritos para él, preocupado siempre por no encasillarse. En paralelo, se alejó siempre del foco mediático, salvo cuando quiso poner su fama al servicio de las causas que apoyó, siempre del lado de la izquierda política, en defensa de los desfavorecidos.

También productor, director y guionista, deja tras de sí un rastro de 200 producciones en más de 70 años de carrera, además de trabajos en la televisión y el teatro, y multitud de premios, entre ellos el del Festival de Cannes de 1980 gracias a Salto en el vacío, de Marco Bellocchio. Nacido en París el 27 de diciembre de 1925, hijo de un violinista de origen suizo, debutó en la gran pantalla a los 20 años en una breve aparición en Sortilèges. Formado en la prestigiosa escuela de interpretación Simon de la capital francesa, compaginó el cine con el teatro hasta que su trabajo en El desprecio, con Brigitte Bardot, le catapultó a la fama en 1963. También trabajó en Diario de una camarera, la primera de las colaboraciones junto a Luis Buñuel, que también le dio papeles en Bella de jour, La vía láctea, El discreto encanto de la burguesía, La muerte en este jardín y El fantasma de la libertad. García Berlanga también rodó junto a él en Tamaño natural.

Piccoli colaboró con Jean Renoir, René Clair, Alain Resnais, Agnès Varda, Jacques Demy, Claude Sautet, Bertrand Tavernier, Claude Chabrol, Louis Malle, Jacques Doillon, Jacques Rivette o Bertrand Blier, entre otros. Y con Alfred Hitchcock (Topaz), Marco Ferreri, Jerzy Skolimowski, Ettore Scola, Manoel de Oliveira, Otar Iosseliani, Theo Angelopoulos, Nanni Moretti o Costa Gavras.