El sector cultural entra en cuarentena

El festival de soul y rythm and blues Mojo Workin' fue de los primeros en anunciar su suspensión, tras la comparecencia del lehendakari Iñigo Urkullu en la que declaró la situación de "alerta sanitaria". La posible cancelación del evento, organizado por la asociación de voluntarios Gure Gauza, era lo más temido por sus responsables que, en la rueda de prensa de presentación del festival que tuvo lugar el jueves, anunciaron que la deuda que deberían asumir sería muy grande. La cancelación supone un derechazo para un evento que, por norma, siempre ha tenido el respaldo del público, pero que, difícilmente, va a volver a levantarse el próximo año, según explicaron sus organizadores.

A lo largo de la mañana, las distintas organizaciones responsables de la programación musical fueron anunciando la suspensión de conciertos hasta el 29 de marzo. Es el caso de Donostia Kultura, que mantiene cerrado todos sus servicios desde ayer a las 16.00 horas. Precisamente, estaba previsto que cuatro horas después el pianista Carlos Fernández-Nieto actuase en el Victoria Eugenia, pero el concierto no pudo llevarse a cabo por las restricciones. De la misma manera, la banda británica tindersticks no se subirá hoy a estas mismas tablas, como tampoco lo hará mañana el exDuncan Dhu Diego Vasallo, en su caso, en el teatro Principal.

Los programadores de Kursaal Eszena también han suspendido sus planes hasta finales del mes. El auditorio tenía una doble cita con la cantante Izaro el 21 y el 27 de marzo -en ambos casos con las entradas agotadas- que se ha retrasado hasta el 19 y el 20 de mayo.

Corales como el Orfeón Donostiarra también han parado en seco. Por un lado, han retrasado el concierto que tenía previsto para el 23 de marzo, en la entrega del Premio de Investigación UPV/EHU-Orfeón Donostiarra, mientras que sus citas en Toulouse -31 de marzo-, Madrid -2 de abril- y Torrelavega -4 de abril- se han cancelado.

En este mismo sentido, las salas Doka y Be Club, con una programación cultural semanal constante, se han sumado a la decisión que el jueves tomó Dabadabay también han dejado su programación en suspenso hasta el día 28. El Jazzaldia también ha cancelado hasta esa fecha el circuito de selección de bandas locales.

Como el resto de actividades bajo el ala de Donostia Kultura, las artes escénicas también han caído. Así Harri orri ar, de la compañía Antz3rkia, no se representó ayer en el Principal, ni hoy se levantará el telón de la casa de cultura de Lugaritz para acoger a Txalo Produkzioak y su obra Zoaz pake santuan, original de Emmanuel Robert-Espalieu, y que en este caso iban a representar Mikel Laskurain y Ane Gabarain. Tampoco habrá oportunidad de ver sobre las tablas del Victoria Eugenia la adaptación a teatro musical del clásico cinematográfico de Robert Wise West Side Story, que se iba a representar entre el 19 y el 22 de marzo.

En cuanto a la iniciativa privada, la empresa Sade cerró ayer sus salas de cine en la capital -Príncipe, Trueba y Antiguo Berri-, al igual que hizo Niessen en Errenteria. Esta decisión se suma a la decisión de muchas productoras, tanto estatales como internacionales, de retrasar el estreno de sus películas. Es el caso de Las letras de Jordi, de Maider Fernández Iriarte, un documental que pasó por la sección Nuevos Directores del último Zinemaldia, y que tenía el estreno previsto para ayer y que, finalmente, se ha retrasado. Las iniciativas vinculadas a las salas de cine, como los cineclubs Kresala y Ozzinema, también anunciarón retomarán su actividad más adelante.

Por su parte, películas como Ilargi guztiak, de Igor Legarreta, que desde hace unas semanas se rueda en Gipuzkoa, decidirán si continúan con los trabajos a lo largo del fin de semana.

Los cuatro museos dependientes de la Diputación del territorio, Igartubeitia -Ezkio-, Zumalakarregi -Ormaiztegi-, Euskal Itsas Museoa -Donostia- y Ekainberri -Zestoa-, también cesarán su actividad durante los próximos quince días. A este cierre también se sumó la Factoría Marítima Vasca Albaola, que se sitúa en Pasaia, y el donostiarra museo San Telmo.

A su vez, Tabakalera ha decidido sumarse a las medidas para evitar la propagación del COVID-19 y cerrar sus puertas a cal y canto. Por lo tanto, todas las actividades propias como Ubik o la Pantalla Compartida con programadores cinematográficos también han echado el cierre. En el caso de Ubik, como en el del Koldo Mitxelena, que también ha cesado de ofrecer servicios, los usuarios que tengan préstamos en sus domicilios podrán devolverlos cuando se reabran las instalaciones.

La nota disonante durante la jornada de ayer fue la del museo Chillida Leku de Hernani. Durante la mañana y gran parte de la tarde, sus responsables mantenían la posibilidad de que el caserío Zabalaga estuviese abierto al público -la organización ya había anunciado medidas para el personal-, idea de la que finalmente desistieron, uniéndose "a los esfuerzos mundiales para combatir la propagación de COVID-19" .

Chillida Leku inauguró ayer la instalación de la escultura Eye Benches III, de Louise Bourgeois, la primera obra de un artista invitado que se expone en la "utopía" de Chillida, una característica de la nueva gestión a cargo de la galería suiza Hauser & Wirth. Asimismo, la directora de Chillida Leku, Mireia Massagué, anunció a este periódico estar trabajando en el 20 aniversario de la apertura del museo, prevista para septiembre de este año; trabajos que se retrasarán por esta situación.

El museo Chillida Leku cierra sus puertas el día que instala la primera obra de un artista invitado, 'Eye Benches III', de Louise Bourgeois

El estreno de 'Las letras de Jordi', de la donostiarra Maider Fernández Iriarte, previsto para ayer, también se ha retrasado

Los usuarios que hayan tomado materiales de Ubik y el Koldo Mitxelena podrán devolverlos cuando se reabran las bibliotecas

El festival Mojo Workin' y los conciertos de Diego Vasallo, Izaro, tindersticks y Carlos Fernández-Nieto han sido cancelados