donostia - Woody Allen ya ha decidido cuál será el título de la película que el pasado verano rodó en Donostia. A diferencia de otras ocasiones, el neoyorquino ha apostado por convertir el nombre provisional del filme, Rifkin's Festival, en el definitivo. El título alude a los dos grandes protagonistas de la cinta: Rifkin, un cineasta que viaja hasta la capital guipuzcoana con su mujer para participar en el segundo pilar de esta obra, el Zinemaldia.

Poco ha trascendido de la trama del nuevo largometraje de Allen, si bien todo apunta a que será una carta de amor a los clásicos del cine y a los iconos del propio director y guionista. No en vano, durante el rodaje en Zumaia pudo verse al oscarizado Christoph Waltz caracterizado como el personaje de La Muerte en El séptimo sello (1957), de Ingmar Bergman, considerado por Allen como el mejor cineasta del mundo. Asimismo, se espera que el neoyorquino homenajee a Fellini, ocho y medio, de Federico Fellini (1963), y a Jules y Jim, de François Truffaut (1962), entre otras, de una manera similar a como lo hizo el movimiento cultural que floreció en el París de la década de 1920 en Medianoche en París (2011).

El festival de Rifkin está protagonizada por uno de los habituales en la filmografía de Woody Allen, Wally Shawn, además de Gina Gershon, Louis Garrel y el ya citado Waltz. Además, han participado dos intérpretes del Estado, Sergi López y Elena Anaya, y el prestigioso director de fotografía Vittorio Storaro.

Este largometraje, que podría tener su estreno en el próximo Zinemaldia, se ha producido en Europa a consecuencia de los problemas que el cineasta tuvo en EEUU debido a una acusación de abusos a una de sus hijastras y es la cuarta colaboración de Allen con The Mediapro Studio, compañía que encabeza Jaume Roures.