Cuenta Hirokazu Kore-eda que si aceptó el reto de rodar su primer largometraje en el extranjero, en un idioma que no es el suyo y con un equipo totalmente francés, fue por algo muy sencillo: conocer a esos actores, actrices y colaboradores que querían hacer una película con él. Y es que por primera vez Kore-eda deja atrás Japón para poner su mirada en Francia con La verdad, el filme donde comparten protagonismo Catherine Deneuve y Juliette Binoche. La película llega tras su paso por los festivales de Venecia, donde inauguró la Sección Oficial, y de San Sebastián, donde el cineasta japonés recibió el Premio Donostia.
Tras Un asunto de familia, película con la que ganó la Palma de Oro el pasado año en Cannes, Kore-eda regresa ahora a la gran pantalla con "un drama madre-hija, ligero y con toques de comedia", centrado en el mundo del cine y que plantea preguntas sobre "la necesidad de la mentira" y "si el acto de interpretar puede considerarse verdad o mentira", apunta él mismo.
Y va más allá: "¿Qué hace que una familia sea una familia? ¿La verdad o las mentiras? ¿Cómo se escoge entre una verdad cruel y una mentira bondadosa? Estas son las preguntas que no dejé de hacerme durante todo el rodaje". De ahí que espera, que ahora todas las personas que vean La verdad, tengan la oportunidad de encontrar las respuestas.
La película narra la vida de Fabienne, una gran estrella del cine francés que en su mundo interior tiene grandes conflictos con Lumir, su hija. La historia arranca con la vuelta a casa de la hija, una guionista, acompañada por su marido americano y su hija. Y lo que comienza como la celebración de la publicación de la autobiografía de la madre, en realidad será el comienzo de la confrontación con una progenitora que vive en un mundo de fantasía que defiende por encima de todo.
¿Ficción o realidad? La veterana actriz Catherine Deneuve interpreta a esa veterana actriz en un personaje, que a veces, puede hacer dudar entre ficción y realidad. Pero Kore-eda se desmarca: "Es cierto que algunas de las cosas que me dijo las metí en la película, por ejemplo la frase actualmente en Francia no hay ninguna actriz que haya heredado mi ADN; pero por otro lado, al leer el guion Deneuve dijo esta actriz no se parece nada a mi". La otra cara protagonista, Juliette Binoche como la hija de Deneuve, fue en realidad el punto de partida asegura Kore-eda, ya que fue ella quien le propuso hacer algo juntos. Interesado, el japonés dio una vuelta a una obra teatral que empezó a escribir en 2003, cuya acción ocurría una noche en el camerino de una actriz de teatro al final de su carrera. Durante el proceso de escritura del guion, tanto Deneuve como Binoche fueron partícipes, en constante diálogo con Kore-eda.
De ahí que el director agradezca que "si sopla una brisa fresca y optimista en La verdad, a pesar de transcurrir casi en su totalidad en el interior de la casa familiar, se debe a que el atractivo y la bondad de Catherine y de Juliette inundan la película de principio a fin". Porque como reconoce, su intención siempre fue "hacer una película seria y ligera a la vez, donde pudieran coexistir el drama y la comedia, como ocurre en la vida real".
