La ‘Antígona’ de Ullate a los pies de Lacarra
Con su última creación que llega hoy a la Quincena, una audaz lectura del clásico de Sófocles que pretende huir de tópicos y lugares comunes, el bailarín y coreógrafo Víctor Ullate se retira de la danza .
Lucía Lacarra vuelve a casa, esta vez de la mano de Víctor Ullate y su Antígona. Lacarra será la encargada de encarnar el papel protagonista en este montaje que será el del adiós de Víctor Ullate, que se retira de la danza a los 72 años de la mejor manera posible: presentando en la Quincena Musical de Donostia una propuesta que se caracteriza por su osadía, una lectura del clásico de Sófocles que llevará las tablas del auditorio del Kursaal hoy y mañana a partir de las 20.00 horas.
Lacarra se reencuentra así con la Quincena Musical dos años después de que acudiera a esta cita para interpretar Carmen de Bizet, también en esa ocasión con el Víctor Ullate Ballet.
En Antígona la bailarina zumaiarra tendrá como pareja a Josué Ullate , hijo del coreógrafo, que tras recibir formación en la escuela que dirige su padre en Madrid, fue merecedor del reconocimiento al mejor bailarín revelación de la escena contemporánea con el premio Leonide Massine en 2013.
Josué Ullate será el encargado de encarnar a Hemón, prometido de Antígona, en esta historia sobre la conciencia y la obediencia.
La Antígona de Ullate, su despedida tras una dilatada carrera plena en éxitos, se estrenó el 19 de julio en Festival de Teatro Clásico de Mérida.
“Principalmente inspirados por el conflicto de cada figura, confiamos en el poder de la danza que, como ninguna otra forma de arte, permite abrir la entrada a las esferas de las emociones universales”, apuntó el propio Ullate.
de la antigua grecia El viaje desde la Antigua Grecia a Donostia lo hace Antígona de la mano de Ullate, que propone una actualización impactante de la tragedia de Sófocles, que se representó por vez primera en el año 441 a.C.
La Antígona de Ullate profundiza en el mundo de los sentimientos que, como subrayó el bailarín y coreógrafo, son “tan antiguos como la humanidad misma”.
Hoy y mañana en el Kursaal, Lacarra pondrá su expresividad y su maestría en la interpretación de la hija del rey Edipo, que entierra a su hermano pese a que el nuevo rey de Tebas lo haya prohibido expresamente, al morir este en la batalla por el control de la ciudad.
Ullate ha decidido alejarse de tópicos y lugares comunes con su Antígona, que pretende adentrarse en la esencia de la que se considera una de las páginas fundamentales del teatro de la Antigua Grecia.
Con este montaje Lacarra volverá a demostrar su versatilidad, como lo hizo en 2006 cuando, también en la Quincena, participó en Pink Floyd Ballet, un espectáculo creado por Roland Petit.