"Las cosas fáciles no me estimulan", asegura la cantante Bebe
La artista inicia hoy en Bilbao una gira vasca que pasará también por Ondarroa y Azpeitia
BILBAO. Tras su éxito con banda en la presentación de su último disco, Un pokito de rocanrol (Virgin), Bebe sale ahora a la carretera en formato de trío acústico. Hoy actúa en el Kafe Antzokia bilbaino y repetirá mañana en el de Ondarroa, para recalar el domingo en San Agustín Kulturgunea, en Azpeitia.
Bebe no recuerda su último bolo en la Aste Nagusia bilbaina en 2010, ante unas 15.000 personas, pero conserva en la retina su reciente paso por Lekeitio, en una iglesia. "Está bien actuar también en pueblos y en este caso fue en una iglesia. Es algo poco común pero suelo acordarme de casi todos los sitios", explica al hacer balance de su última gira. "Hemos tocado bastante y seguimos con ella fuera de España. No podemos quejarnos y el disco ha sido bien recibido aunque algunos fans prefieren los primeros", apostilla la extremeña.
No me ates que echo el vuelo, canta Bebe en su último y más crudo disco. La libertad es vital para ella. "Es algo muy importante y que suele transmitirse a la gente. Cuando tú estás feliz con un trabajo, sobre todo en directo, eso se acaba notando. El giro de sonido de mi último disco lo hice a propósito porque lo sentía así. En caso contrario no lo hubiera grabado, cariño", confirma.
Bebe apuesta ahora por una sonoridad "más tranquila e íntima" con estos conciertos en formato de trío con el batería Carlos Sánchez y Pablo Novoa, un clásico del pop estatal que se dio a conocer con Golpes Bajos y que toca guitarras y teclados. "Me ayuda a llevar las canciones a otro lugar", contesta la cantante, que quería otra lectura de su repertorio. "Aquí ya no podíamos seguir tocando con toda la banda y lo bueno que tienen los momentos de crisis es que tienes tiempo para trabajar las cosas más que antes y darle más a la creatividad. Tenía ganas de volver a los conciertos pequeños porque empecé así, tocando en solitario y en bares. Las canciones suenan más desnudas. Es como un striptease", apostilla entre risas.
"Dar otro sonido a las canciones es complicado pero agradable. Algunas salen rápido y otras no, pero eso es lo bonito del reto, quitarles un vestido y darles otro. Eso me estimula; las cosas fáciles, en cambio, no", afirma Bebe, que alternará la gira en acústico y con banda en los próximos meses en Bulgaria, Turquía, Rusia y Latinoamérica. Desconoce si este año habrá nuevo disco a pesar de que "siempre estoy escribiendo pero no sé qué sonoridad quiero". En lo que no duda es que volverá a su faceta de actriz si le ofrecen papeles interesantes: "Depende de las agendas y de lo que ofrezca cada proyecto".